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viernes, 24 de septiembre de 2010

Continuación de la continuación


Amig@s, ligeramente alucinada estoy.

Tenéis que saber, que un grupito de gamberras, con una cabeza pensante al frente (la tengo localizada, y se va a acordar), me han hecho una pregunta de alucine: Quieren, “la historia de la tortilla de patatas”. De verdad, de verdad, amig@s, si esta que escribe fuese un homo, nunca, nunca le hubiesen hecho semejante encargo. Pedía ayuda, ideas sobre temas interesantes. Pero… no cosas que me coman la moral, me rebajen, como estudiosa de la Historia, me quedo para narrar una nueva modalidad de la Historia, que ahora está muy de moda, llamada Historia de los usos y costumbres en general. Pero eso no me gusta. Lo mío es la Historia Antigua, con sus mitos, tradiciones, arte, enfrentamientos armados, política, etc. Incluidos los griegos y romanos.

Cuando veo una película pseudo histórica, se me cae el alma a los pies. Normalmente son americanos quienes hacen estas barrabasadas, que no tienen ni puñetera idea de Historia. Lo cuentan como quieren, y además son tan púdicos que ahí no ponen la realidad de los hechos.

Por poneros un ejemplo, os diré que Alejandro Magno se casó varias veces. También tuvo amantes, pero fueron más sus “compañeros” masculinos. Varios amantes, precedieron a Hefestión, pero parece que este último fue su gran pasión y amor.

Cuando Hefestion se muere (parece que envenenado), Alejandro pasó seis meses en un estado etílico continuo. Cuando estaba así, podía hacer cualquier cosa. Sus amigos, compañeros y generales, estaban “con la mosca detrás de la oreja”. Además, tenía muchas enfermedades, heridas mal curadas (en la India, casi la palma por una que recibió en un pulmón), fiebres, tifus (este señor era un “pupas”, todo lo que había lo pillaba).

Yo no sé, y la Historia tampoco; para mí que le ayudaron a dejar este mundo.

Otro que tambien se las traía era Julio Cesar (decían las malas lenguas, que era el amante de todas las mujeres de Roma y la puta de todos los romanos). En realidad, una se pregunta: ¿cómo estos personajes tuvieron tanta actividad amorosa y a la vez ese montón de territorios conquistados, y salir airosos de las conjuras diarias que les tendían sus enemigos-amigos? Pero la última no erró.

Ya hablaremos más delante de estas cosas y de otras muchas, pero ahora. Voy a terminar lo de la “tortilla de patatas”. A ver si no se les ocurre otra sandez semejante y las tengo por un tiempo aplacadas.


Ya sabéis amig@s, que las patatas las trajeron de America del Sur. Las crónicas, hablan de unas tortillas que vendían en los mercados. Solían ser de huevo y maíz. Ya se refiere a ellas Hernán Cortes en sus cartas. El tenia tratos con los incas, y de ellos sacó mucha información. Luego estaba la Historia general de las Indias, los cronistas… estos eran como los actuales periodistas. La diferencia estaba en que eran mandados por los reyes, para conseguir información.

El primer documento en el que se menciona la famosa tortilla es navarro. El autor, ponía en conocimiento de las autoridades, la escasez de alimentos que padecían sus conciudadanos.

Zumalacárregui
Hay una leyenda que atribuye al general Tomás de Zumalacárregui, que durante las primeras guerras carlistas, estando en el sitio de Bilbao, se le ocurrió para alimentar a su ejercito, que estaba famélico.

Otra variación de esta leyenda, con el mismo personaje, pone como autora a una ama de casa navarra, donde pernoctaba el general; como no tenía muchos huevos, pero sí patatas y cebolla, hizo un revoltijo con estos ingredientes, dejando encantado al general, y este se lo encasquetó a su ejercito, para que estuviesen  mejor nutridos y pusiesen más empeño en la contienda.

Ahora viene lo más alucinante.

Científicos titulares del Centro de Ciencias Humanas y Sociales del CSIC, sitúan el comienzo en Villanueva de la Serena (Extremadura) veinte años antes de las primeras menciones en la leyenda.

Estas informaciones, están siendo estudiadas, por diversos científicos e historiadores, tanto locales como estatales.

Y uno se pregunta: ¿Cómo estando España al borde de la bancarrota, con tantos ciudadanos en el paro, se pueden dedicar unos científicos a cosas tan nimias?


Esto amig@s, me ha dejado muy mal sabor de boca, por lo tanto voy a dejar aparcado el tema de las religiones para la siguiente entrada, y  os contaré cosillas tontas de mi primera juventud.

Presumida, coqueta, y ligeramente monilla, era yo. No obstante, a los dieciocho o diecinueve años, no me permitía salir con ningún homo, mi madre, que era muy estricta. Si se llegaba a enterar de algo, me hubiese encerrado, por lo menos por un año.

Pero… tenía un vecino, al cual yo miraba con la persiana bajada, pero dejando aberturas en las lamas.


Y es que era…un bombonazo, algo precioso. No sé porque razón (tenía un coche y una vespa), la moto siempre la estaba arreglando, sin camiseta y con unos vaqueros viejos y rotos, por una rodilla. Por la rotura, se veía un trozo de pierna morena y sin pelillos. Tenía unos pectorales, unas piernas… un culete. Parecía el dios del amor. A mí me tenía loquita. Por las noches de verano, nos solíamos reunir un grupo de amigas en la puerta de casa, venían chavales que conocíamos, o hermanos de mis amigas y charlábamos un rato.

Este vecino, tambien venía. Un día me pidió que saliese con él (a mí me parecía que era muy mayor, tendría… más o menos…veinticuatro años), vivía solo con su padre que era un mal bicho (se había cargado a su mujer a base de malos tratos y disgustos, le gustaban todas las mujeres menos la suya). Por entonces, la única ayuda que recibías era la del cura, te decía: ten paciencia, sufre con resignación, Dios te lo pagará en el cielo…



Este amiguete, se quería casar ya, la vida junto a su padre le resultaba insoportable.

Pensé que era muy mayor para mí, que lo de casarme no era algo atrayente, sabía que en mi vida, tendría que haber muchas otras experiencias, de todo tipo. Le dije que no. En esa misma semana conoció a la joven con la que se casó.

Después, supe que habían tenido tres hijos, la mujer había muerto, y… hace unos años tambien falleció él.


Otra anécdota que me sucedió fue la siguiente: Volvía cada año en verano, cuando vivía en el extranjero, huyendo de las plagas de Yahvé.

Puerta de Hierro
Tenía de siempre una amiga la cual a su vez, contaba con varios hermanos. El mayor se hizo ingeniero en una universidad de gran prestigio (no voy a decir cuál porque es de sacerdotes y a estos señores, ni agua les doy), pero no se dedicaba a su carrera; lo suyo eran los negocios. Un verano, quedamos su hermana y yo con él (quería enseñarme varios de sus negocios). También se había construido un palacete en Puerta de Hierro.

Mi amiga se iba a quedar en el centro; él se ofreció para llevarme a casa de mis padres donde vivía cuando regresaba de viaje.

Por el camino, paró y se me declaró. Me quedé alucinada; yo estaba casada, tenía una hija y quería a mi maromo. Me quedé traspuesta, anonadada, pensando qué podía decir sin herirle. Pero… de repente… me dio un “muerde”, me pilló desprevenida. Una cosa así dada, no se disfruta; ni quien lo da, ni quien lo recibe. Es algo humillante, te ves como violada, forzada, creo que toda la sangre se me subió de golpe a la cabeza. Se libró de mis garras porque era quien era, y le conocía de toda la vida, pero ya le dije: ¡da gracias a que tu hermana es mi amiga, porque si no… termino contigo a “ostiones”!! (reconozco que ya por entonces era un poco mal hablada cuando alguien me incordiaba). Quise salir del coche, pero me pidió perdón, me llevó a casa y ni siquiera le dije adiós.

Tiempo después, se casó con una sudamericana, que le atracaba diariamente a base de comprar joyas y abrigos de piel. No sabía yo que estas señoras tenían tanto frío; no uno ni dos, docenas de abrigos de pieles de los pobres animalitos (no es un invento, me lo contaba su hermana que estaba hasta las narices de ver cómo su hermano que era tan inteligente, se dejaba expoliar a diario de esa forma).

También esta mujer le costó la muerte. El seguía con sus negocios, los amplió a Sudamérica (algo relacionado con la madera), pero en sus viajes a aquella zona fue atacado por una enfermedad que le produjo fibrosis pulmonar.

No debía ir allí (pero los gastos caseros, eran de tal magnitud, que no podía dejarlo). La única salida, era un trasplante de pulmones y corazón a la vez.

Mi amiga, su hermana, se negaba. Ella era enfermera en una clínica privada, sabía los problemas que podía  conllevar una operación tan compleja, pero por más que le dijo, él estaba decidido y no quería continuar viviendo sólo a medias. Le operaron y no logró superar el postoperatorio.

Estas son dos vivencias agridulces de mi vida anterior.


Pero no quiero terminar sin narraros un caso, que sucedió en nuestra propia familia. Era una persona ya fallecida, que nunca había visto y mi madre, nos contó la historia.

Era un señor viudo, que de pronto se encontró con una de estas “sacamantecas”. A veces me gustaría ser homo para saber qué tretas emplean, para idiotizar y dejar atontados a nuestros homos. Ni es el primer caso, ni será el ultimo; llegan a sus vidas en un momento de bajón, es como si les agarrase una secta, luego hay que desprogramarlos, normalmente ya no hay tiempo; quince días para arreglar los papeles, bodorrio y quince días después, todos los bienes de el santo varón están a nombre de la madama. Hacen un viajecito para ver el pueblito de la novia y de paso traerse a todos los muchachuelos que esta suele tener, cada uno de distinto padre, que es más divertido. Al volver, no suelen durar ni quince días. No sé si es que les atan a la cama y los tienen a base de viagra hasta que la palman, pero felices. O les hacen vudú o algo similar.


Otra cosa que pienso, es que esos pedazos de carne con ojos, eso sí mucha carne pero mal repartida (lo cierto es que muchos hombres a cierta edad, de lejos ven mal, y de cerca, con tanta chicha, pues… tienen que verla por partes, y se les olvida. Si les gusta el culete, lo miran, pero a la vez no se dan cuenta, de una enorme tripa, acompañada de varias faldillas (así se le llama, a la carne de la tripita que cae sobre los genitales, y puede llegar casi hasta la rodilla).

He dejado olvidado al protagonista de esta historia, sigo con él. A los quince días boda. Quince más, donación de bienes en su totalidad. Otros quince, y con los cables fundidos, se lo encontraron recogiendo cartones y viviendo en un chamizo. Su hija lo encontró y se lo llevó a casa, donde al cabo del tiempo y sin recuperarse mentalmente, murió.

Y esto querid@s, no penséis que solo les sucede a cuatro idiotas. Torres más altas han caído y seguirán cayendo; mejor, homos, no os pongáis en su camino. ¡¡Quedáis  advertidos!!  ¡¡¡Con esas señoras, ni agua!!!

Amig@s pronto volveremos a estar juntos.

miércoles, 22 de septiembre de 2010

CONTINUACIÓN

Explicación del Video: Amig@s, os parecerá que este vídeo no está en la onda de mi forma de pensamiento. La verdad, es que al comentarlo con el autor (Amanlord), éste me dijo que a él tampoco le gustaba la muerte de un toro, pero que era otra cosa; se trataba de las tomas de un aspecto de la llamada “Fiesta Nacional”, y no había ninguna escena que pudiese herir la sensibilidad de nadie.

Entonces, vi el vídeo dos o tres veces. Después… escuché la música con los ojos cerrados (que es lo que debéis hacer vosotros), y me enamoré de esa música tan maravillosa, que tiene una fuerza espectacular y de entre los acordes aparece la delicadeza hecha obra de arte.

Los toreros, suelen ser personas que en un grado u otro se relacionan con el mundo del toro. Para ellos es irresistible la llamada de este enfrentamiento entre un toro y un torero.

Recordad que la fiesta de los toros fue introducida por los árabes en España, e incluso, el Cid Campeador, pidió permiso, cuando había una de estas fiestas, a las autoridades árabes, para lancear un toro. Antes, se los liquidaba a lanzazos.

Ahora os contaré algo personal: En una ocasión, fui a una capea, con mi querida hermana y nuestros respectivos maromos.

Salió el torito, tan majo, tan alegre, juguetón, parecía un onagro de torito (burrito pequeñito). Mi hermana y quien os lo narra, nos miramos… ya sabíamos lo que deseábamos, ambas. Saltamos a la plaza, y con un capote que había por allí, nos pusimos al alimón a darle capotazos al torete.

Nuestros chicos, decían, “¡volved! que os va a dar o pisar” pero ellos no se movían de la barrera.

Querid@s, nunca he tenido más miedo, más sentimiento de poder; era una explosión de júbilo. Que tuvimos que dejar, pues los chicos se estaban volviendo locos.

Ante la belleza de algunos ejemplares, viene a mi memoria la Leyenda del Minotauro de Creta. A grandes rasgos os diré, que Minos, con la ayuda de Poseidón, logró tomar el poder en la isla. Para celebrarlo, Poseidón hizo salir de las aguas un magnifico toro blanco, para que Minos lo inmolase en su honor, pero… era un ejemplar magnifico, le escondió entre sus rebaños y mató a otro en su lugar creyendo que Poseidón no se iba a dar cuenta.


Al ver el cambiazo, se enojó (ya sabéis como se enojaban los dioses, eran terribles) e hizo aparecer un deseo incontenible de intimidad carnal en Pasifae, la esposa de Minos, por el hermoso toro. No sé como lo arreglarían (se cuenta, pero yo no me lo creo, porque el aparato reproductor de estos animales tiene un tamaño de acuerdo con su cuerpo). Al cabo del tiempo nació el Minotauro (cabeza de toro, cuerpo de hombre, y el alimento carne humana). Quizá os lo cuente en profundidad en otra ocasión.



Continuación del anterior tema.


Vamos a hacer un pequeño resumen de lo que ya sabemos:

La Prehistoria, es el periodo donde no encontramos ningún texto escrito.

En cuevas y parajes cubiertos, encontramos dibujos, algunos muy buenos, pero predominan los signos, las manos, vulvas y algunos penes.

Las figurillas encontradas suelen referirse a símbolos femeninos, como mujeres de grandes senos y enormes caderas, pronunciación exagerada del sexo femenino. También algunos símbolos fálicos.


Al terminar el cuarto milenio A.C., en la zona de Mesopotamia encontramos Ciudades-Estado, con escritura, dioses ya consagrados por la población, estatuillas de todas clases etc.

Casi al mismo tiempo vemos la misma evolución en Egipto.

Amig@s, sabéis que cuando comienza la escritura, ya sea en arcilla, en algún metal, o papiro, entramos en la Historia. Pero… esto es muy complejo. Cuanto más avanzan las excavaciones y en zonas más amplias, aparecen nuevos signos de civilización. Por eso, no podemos datar con gran precisión, cuando esta comienza.

Lo que sí sabemos es que la cultura llega acompañada de religiones más o menos elaboradas y es que el “homo” se sentía insignificante, y necesitaba saber que sobre él, un poder omnipotente le protegía.

La primera religión monoteísta de la que tenemos datos fehacientes, es la introducida por Amenofis IV, que cambió su nombre por Akenaton. Su padre, Amenofis III, ya tenía elaborada, más o menos, esta nueva religión, pero murió joven y no pudo ponerla en práctica.



La representación de este dios es el gran disco solar Aton, que con sus rayos envía la fuerza vital, que hace crecer animales y plantas, da calor al mundo y comunica el espíritu y la bondad.

Los antiguos textos que componen el A.T. son copias más elaboradas de los escritos encontrados en la zona de Mesopotamia.

Representan a un dios celoso, vengativo, cruel, solicitador de sacrificios sangrientos, que elige a un pueblo y solicita de éste alianzas y total sumisión.

El resto de la humanidad, no le concierne, y cuando se cansa destruye ciudades, personas y naturaleza.

Como os habréis dado cuenta, tiene todos los defectos que cualquier hombre en esa época tendría, lo que nos lleva a sospechar que la imaginación de los hombres es grande, que los dirigentes de los Estados pretendían imponer una serie de tabúes, que serían interesantes para mantener en el poder a una clase sacerdotal, compuesta por los mismos reyes y sus allegados.

Vamos a continuar con la leyenda de Moisés a grandes rasgos.

Veréis amig@s, en Egipto no está constatado que hubiese esclavos. Los habitantes del país del Nilo, trabajaban la tierra y cuando terminaba la recogida de los frutos, entonces se dedicaban a la construcción de pirámides y santuarios religiosos. Por su trabajo percibían un salario, que ha quedado reflejado en las tablillas halladas en los pueblos que se construían para los obreros cerca de las edificaciones.



Moisés no está documentado fehacientemente en ningún escrito egipcio (ellos hasta la cosa más nimia, la anotaban).

La primera plaga era convertir el agua del Nilo en sangre (aquí exageran un montón: ponen las de todos los ríos, las de las casas, en fin, todas las aguas).

Cuando llega la subida o crecida del Nilo, todos los años se produce un estado de enrojecimiento de las aguas, por la composición de las calizas rojizas del lecho.

La segunda plaga fue llenar de ranas todas las tierras de Egipto (sin documentar). Supongo que el pueblo egipcio comería ranas durante unos días. Ya sabéis, que las ancas de rana son una exquisitez carísima.



La tercera y cuarta plaga eran parecidas. Primero mosquitos, después tábanos.

Quien haya estado en Egipto habrá podido comprobar que ese es el estado normal del país: insectos de todo tipo pululan por el aire.

Además, en una visita que hice a un mercado de carne, no la vi, estaba toda recubierta de insectos. Cuando me percaté de aquella horripilante cosa salí corriendo y gritando;
Pero… el ruido y los gritos habían alertado a los insectos, y todos nerviosos creo que me seguían. ¡Que día! amig@s ¡que día!!!!!!!!!!!!.


Quinta plaga. Mortandad de todos los animales de Egipto (los de los hijos de Israel, todos vivitos).

Sexta plaga, polvo sobre todo Egipto. Producía llagas y purulencias en los hombres y animales (parece que ya había otra vez animales). En Kuwait, donde viví varios años, parece ser que éramos castigados todos los años varias veces con esta plaga que cegaba a la gente. Luego venían a España para que en la clínica de Barraquer les curasen. Esta clínica se ha hecho de oro con tantos pacientes de los países árabes.

Séptima plaga, truenos y granizo en cantidad, ¡qué pasada, este Yahvé! (que por cierto había endurecido el corazón del Faraón para que su poder luciese al máximo).


Octava prueba. Langostas por todo Egipto. Tengo oído durante mi estancia en países árabes, que eso era algo muy normal. La gente ponía ollas de gran tamaño con agua hirviendo, y después las escurrían, les quitaban la cabecita y las alas y se las comían como pipas.



Novena prueba. Densas nieblas que impedían la visión de unos a otros.

Décima prueba. Muerte de los primogénitos de todos los egipcios, desde el hijo del faraón, hasta el de la última esclava. Y todos los primogénitos de los animales.
Antes había ordenado a los hijos de Israel, que pidiesen oro y objetos de valor a sus vecinos. Por donde pasaban estos señores, tenían que salir cargados de riquezas.

De nuevo puso dureza en el corazón del faraón que no quería quedarse sin sus ¿esclavos? ¡Que no había esclavos en Egipto! ¡Jopé! qué plastas y que repetitivos, los que escribieron, estas… boutades (tonterías amig@s).
Extendió su cayado Moisés, parece que sobre el mar Rojo. Sus aguas se separaron. Pasó todo el dichoso pueblo y hay que ver desde el comienzo como pueblo hasta ahora, la de gente que se habrán cargado, y todo por ocupar unos territorios dados a mala conciencia, solo para jorobar a todo el mundo.

Pero… si ellos procedían de Ur (que estaba en Mesopotamia) por qué no se quedaron allí, estos liantes.

Cuando pasaron, los soldados del faraón se internaron en el mar (si hubiesen dicho de un riachuelo… pero Yahvé hacía todo a lo grande), entonces… con un mal café que tenía este Moisés, otra vez con la varita, hizo que las aguas se cerrasen, ahogando a todos los soldados del faraón. No dicen si el faraón tambien se ahogó.

Pero amig@s... hechos tan truculentos, no los hubiesen dejado sin datar. Eso es imposible.

Ya seguiré en otro momento con este señor (que era tartamudo y por eso llevaba siempre a su hermano Aaron con él. Para que el hermanísimo dijese todas las brutalidades que seguían este camino: Yahvé a Moisés, éste a Aaron, y él soltaba todo por su divina boquita).

Ahora voy a contaros un hecho verdadero. Cuando… por culpa de las presas hechas en el río Nilo, las aguas crecían y crecían de nivel, la mayoría de los países europeos, mandaron a sus egiptólogos para ayudar a trasladar los templos que iban a quedar sumergidos bajo las aguas. El trabajo era numerar las piedras, desmontarlas y trasladarlas a un sitio más alejado donde volvían a construir los templos. Los egipcios, agradecidos, dieron a cada país un pequeño templo por su ayuda.


A España, le correspondió una birria de templo, eso no era ni templo ni nada, parecía más bien una mesa de ofrendas, y los nuestros se habían dejado allí la piel. Estaban los templos en piezas, numeradas para embarcar, en el atracadero de los barcos. Pero… el director de nuestra expedición que era un hombre de muchos recursos, orgullo y a la vez pillería… A los franceses les había correspondido un templo precioso, y este pillo, cambió la numeración de los pedruscos. Todo el mundo vino desolado y disgustado, porque durante años habían trabajado muchísimo, y los franceses ni una décima parte. Claro está que los franceses, eran los franceses. Y los nuestros se pusieron a la tarea de descargar las piedras birrias del barco. Pero enseguida se dieron cuenta que eso no era la patata regalada; eso era el templo que iba para los franceses (o sea, amig@s el precioso templo de Debod.

Los franceses, protestaron y volvieron a protestar y aquí amg@s dijeron: a lo hecho pecho, y se quedaron con el bonito templo (ahora estamos esperando que sea cubierto por una cúpula transparente, para que la polución no lo afecte).

En la próxima entrada terminaremos con estas dos religiones. En la siguiente, o sea en la referida a la Musulmana, os contaré cosas alucinantes. Que os dejaran con la boquita ligeramente entreabierta.

Hasta pronto amig@s.



lunes, 20 de septiembre de 2010

Un descubrimiento...

Religiones comparadas de forma "lait", y desenfadada.


Como os prometí en la anterior entrada, voy a comentaros de forma ligera, desenfadada, y espero que atractiva, las llamadas Religiones del Libro. Estas son: Judaísmo, Cristianismo y Musulmana, He decidido comentar sólo estas, porque son las que realmente están en la base de nuestra cultura. Aunque todas han nacido en Oriente Medio.


Cuando mi madre, que era una mujer de mente muy abierta, consideró que mi hermana y yo estábamos lo suficientemente formadas para leer la Biblia, nos compró sendos tochos; son de color granate las tapas y la funda. Está escrita en papel biblia y tiene 1530 páginas. Ya sabéis, con los cantos dorados  y papel finísimo. De tanto usarla, varias veces se me ha caído al suelo y el lomo está despegado.


Me gustaba mucho, es un tema muy interesante para mí. Varias veces lo leí y lo que más me gustaba, era el llamado Antiguo Testamento. Veréis… para un historiador o futuro historiador, la Biblia, es un libro muy importante.

Aquí he de hacer un inciso, como ya sabéis, y os lo de dicho a veces, mi deseo al escribir este blog es haceros sonreír y divertirme yo a mi vez. Es un guiño a la pacatería de esta sociedad, que condena a la mujer madura a estar aislada cuando ha perdido a su pareja. Pues bien amig@s, cuando un familiar muy cercano me ha comentado que mi vida era muy liberal, me ha hecho daño. No pensaba que las boutades (salidas, ocurrencias) que narro fuesen creídas por ninguno de mis amigos o familiares. Por lo tanto, os haré una declaración, jurada: Nunca he desayunado, comido o cenado, con ningún homo. Lo más grave que he hecho, ha sido tomar un café en una cafetería.

Los amigos jovencitos existen, pero lo único que hago es chatear con ellos para darles consejos, como si fuese su madre.

Amig@s, en ningun momento he salido o saldré con un jovenzuelo, me parece algo anormal, salir con alguien que puede ser mi hijo. Necesito compartir ideas similares, experiencias, vivencias… toda una serie de cosas  que es imposible que personas de tan distinta edad puedan compaginar. Amig@s, estoy decidida a no salir con nadie, hasta que no crea que esa persona puede ser la indicada para ser mi compañera de viaje. Y tambien es posible que este blog sirva de criba para saber qué personas están a mi lado, me conocen, me aceptan y quién no.

Me gustaría que dieseis un repaso a la vida de las Hermanas Brönte; fueron las más famosas novelistas del siglo XIX. Vivieron semienclaustradas  y murieron todas muy jóvenes.

Y ahora Amig@s tras disculparme con las personas que no me conocen, por intentar fantasear un poco, enlazo de nuevo con el tema de esta entrada.

Os decía que los historiadores o futuros historiadores nos acercamos a la Bibia con una gran curiosidad.

Tenemos por un lado, el primer libro escrito sobre la saga de un pueblo, su religión, costumbres, peculariedades y normas seculares.

La religión es tratada como parte de la mitología. Lo más importante es el desarrollo mental, la evolución de todo un pueblo en su conjunto.

El Tnakh es la Biblia hebrea. Los cinco primeros libros componen la Torah (Pentateuco); son los escritos fundamentales de los judíos de la antigüedad. La leyenda los atribuye a Moisés y creados por inspiración divina.

La Biblia es una compilación de textos que en un principio eran documentos separados (llamados libros) escritos primero en hebreo, arameo y griego, durante un periodo de tiempo muy dilatado y después reunidos para formar el Tanakh (Antiguo Testamento para los cristianos). Estos añadieron el Nuevo Testamento. Ambos Testamentos forman la Biblia cristiana.

El Antiguo Testamento narra la historia de los hebreos.

El Nuevo Testamento, la vida, muerte y resurrección de Jesús, su mensaje y la vida de los primeros cristianos. El  N.T. fue escrito en griego. En él se cita con frecuencia el A.T. de la versión de los Setenta (esta versión fue escrita en Alejandría –Egipto-). El nombre de LXX, en latín Septuaginta, se debe a que debía redondearse a 70 el número total de sus 72 presuntos traductores. La leyenda refleja que por mandato del Faraón, Ptolomeo II Filadelfo (284-246 a.C.), dichos sabios trabajaron por separado y aislados la formación de un compendio de los textos sagrados del pueblo judío. Según la misma leyenda la comparación del trabajo de todos reveló, que los sabios habían coincidido en su trabajo de forma milagrosa.

Seguramente, este mandato del faraón no sería para avivar la fe judía; más bien para aumentar con estos textos la Biblioteca de Alejandría.

Bueno, amig@s, lo más pesado ya se ha terminado. Ahora vamos con las curiosidades.

En primer lugar, tenemos a Lilith.

El origen de Lilith, parece hallarse en Mesopotamia. Los judíos exiliados  en Babilonia, llevaron a su tierra de origen, la creencia de esta criatura ¿maligna?

La única mención en la Biblia aparece en Isaías 34:14.

En la Biblia de Jerusalén, es mencionada una vez, y es que había que cercenar su nombre del texto sagrado ya que ella con su cuestionamiento, invitaba a la rebelión.

Leyendo la Biblia nos enteramos que allí están escritas dos versiones de la creación del hombre. En el capítulo primero del Génesis se dice: y Dios creó al hombre a su imagen, a imagen de Dios los creó; varón y hembra los creó, por lo tanto la mujer y el hombre fueron creados al unísono.

En el capítulo segundo, la leyenda de Lilith fue incluida en algunos textos judíos tradicionales.

Según la tradición popular medieval, abandonó a Adán y se fue a las cercanías del mar Rojo, donde se emparejó con varios demonios. Tambien cuenta que Adán fue hecho de polvo mientras que Lilith de excrementos y podredumbre.

Después de la huída de Lilith, ante la insistencia de Adán que deseaba una compañera como todos los animales la tenían, Dios le durmió, sacole una costilla y con ella formó a Eva. Cuando Adán despertó se alegró muchísimo, y la llamó varona; y dijo: esta si es carne de mi carne y sangre de mi sangre.

Después llega la caída en pecado por desobediencia. ¿Pero… amig@s? ¿Por qué puso el Creador esa tentación en el camino de esta pareja? Todos los avances habidos hasta la fecha, se han debido a la curiosidad, y a la necesidad. ¿Cómo es posible que una falta cometida por la primera pareja, conlleve la culpa para todos sus descendientes?

Se me olvidaba hablaros de Caín. Fue el primer hijo. Las malas lenguas del pasado, refieren que era hijo de Eva y Lucifer, o el Ángel Caído, o como queráis llamarle.

El caso es que se dedicaba a cultivar la tierra. Nació Abel, y fue pastor o cazador (relacionado con los animales). Ambos ofrecían lo mejor de sus primicias a Yahvé; Caín, sus espiguitas, frutas…esas cosas y Abel, corderitos, los más presentables, y más animales que cuidaba. Pero amig@s, el Creador, cuando Caín formaba una fogata y allí quemaba, sus ofrendas, Yahvé, fruncía el ceño y le miraba con gesto adusto, el humo se expandía por todas partes, pero ninguna hacia arriba. Abel, quemaba sus corderitos, y Yahvé feliz y contento, hacia que el humo llegase directo hasta el cielo.

Caín estaba mohíno y enfadado (creo que con razón), pues el Señor no se comportaba de la misma forma con ambos. Y encima Yahvé, le daba” la vara” diciéndole que el diablo estaba tras sus actos y regañándole sin motivo. Además su hermanito se burlaba de él.

Así que un día, harto de todo (la leyenda narra que con una quijada de asno), mató a Abel. Yahvé le condenó a vivir errante durante toda la vida. Este personaje, era muy apreciado por Saramago. Escribió un libro sobre él, llamado “Caín”.

Después… amig@s, parece que los hombres, empezaron a multiplicarse y tuvieron hijas, y digo yo: ¿se multiplicaron ellos solitos? no aparece ninguna otra jovenzuela excepto Eva, que no creo que diese para muchas multiplicaciones. Además consta en el A.T. que tuvieron tres hijos, varones, sólo varones ellos. ¿De dónde salieron tantos hombres? ¡Ay amig@s! por eso a la Iglesia como institución, le horroriza que una persona no docta como yo, pueda tener una Biblia en las manos y hacerse unas preguntas tan estúpidas.

De repente aparecen unos hijos de Yahvé, que dijeron: “qué chavalitas más guais”, y se unieron con las más macizas, como diría un amigo que es un cielo, al que quiero muchísimo. ¿Quiénes serían esos hijos de Dios? ¿Serían los angelitos, disfrazados de homos? ¿Y por qué no hizo Yahvé también angelitas? ¡Dios… que lío tenía armado!
Y las muchachuelas se quedaron con tripita… y esos nenes fueron los antiguos héroes de la primera edad. Tambien había gigantes. Tal melé sobrepasaba lo razonable, las hijas de los hombres, liadas con los hijos de Dios, y los gigantes todos revueltos. ¡Qué pasada!

Ni Dios mismo lo aguantó, y pensó… esto es un desatino; lo mejor es terminar con todos y me quedo tranquilito, como estaba al principio.

Pero… había una familia de buenazos, que seguían el camino recto. Noé era el padre de esta unidad familiar, y a él le contó lo del Arca de la Alianza. A Yahvé le gustaba mucho eso de las alianzas; siempre estaba haciendo alguna.


Y llegó el Diluvio. Tenéis que saber, que en la amplia zona de referencia, se unen al final los grandes ríos Eufrates y Tigris, y las inundaciones eran algo común en aquel lugar.
 

Tenemos la torre de Babel y la confusión de las lenguas.

Amig@s, los judíos habían sido llevados por la fuerza a Babilonia y destrozado su sagrado templo.

El odio hacia los babilonios era total. En aquel tiempo toda la zona ahora conocida por Irak, estaba dividida en pequeños reinos; algunos dioses eran comunes y otros diferentes; predominaban las diosas, por estar más unidas a la naturaleza. Torres como la de Babilonia había en todos los reinos grandes o pequeños; en ellos, se celebraban rituales de bodas sagradas para que la diosa concediese una buena cosecha. Se unía el rey a la sacerdotisa en esta ceremonia. Tambien las torres eran usadas como lugares de estudio del cielo. El material con el que eran construidas era arcilla, por eso, en muy poco tiempo se estropeaban. Entonces construían otra torre sobre la anterior.

De la cantidad de información aparecida en los últimos tiempos, se deduce, que la mayoría de los textos sagrados judíos están copiados (con ligeras alteraciones) de las antiguas leyendas y mitologías de la zona de Babilonia.

Aparece Abraham con el que Yahvé (Dios) hace una alianza. Le pide que deje su pueblo (Ur), su parentela, la casa de su padre y le dice “encamínate a Canaán. Esa tierra te daré a ti y a tu descendencia”. Pero… Amig@s, aquella… no era una tierra vacía: allí vivían los cananeos. Parece ser que como la alianza era con este señor, los cananeos no contaban. Los filisteos, y otros pueblos de la zona no contaban.

Como veréis amig@s, los problemas los iba liando Yahvé de uno en uno.

Abraham decidió, después de estar un tiempo en la zona, emigrar a Egipto, pues en la tierra cananea había una gran hambruna.

Pero… su mujer, Sarai, estaba como un queso, y este santo varón decidió presentarla como su hermana, para que no le quitaran a él la vida (para quedarse con ella).

El faraón, se enteró de la belleza de esta señora y la tomó por mujer.

Yahvé, se enfadó, se enfadó mucho, y empezó a mandarles plagas, muerte y destrucción. No sé como se enteraría el faraón de que Sarai era la esposa de Abraham; el caso es que le llamó y recriminole por no haber dicho que era su esposa. Se la entregó y también montones de animales y otras riquezas. Marchó hacia el desierto del Negueb, supercontento, con tanta riqueza dada por faraón. Pienso que su tienda (donde se alojaba) sería de un tamaño proporcionado a los cuernos que portaba.

Moraleja de esta historia: Si tu mujer está como un tren, déjala que se divierta un poco; vuelve con más experiencia, y además te puedes encontrar con una pasta gansa. Lo de los cuernos, es algo psicológico, todo el mundo se acostumbra.

Pasado el tiempo, Yahvé se le apareció  en sueños y de nuevo hizo un pacto con él. Esta vez fue más lejos: le dibujó un plano mental de lo que sería la tierra de sus descendientes, pero… allí había habitantes. ¡Qué importaban si no eran del tronco de Abraham! Y todavía este no tenía ningún hijo; por eso, su esposa Sarai, le dijo: soy estéril, no tengo ningún hijo. Entra, o penetra en Agar mi esclava y así por su mediación podré tener hijos. O sea, eso fue como un vientre de alquiler actual, pero sin alquiler, pues era su esclava, era una cosa, una pertenencia más.

Concibió la esclava y miraba por encima del hombro a su señora. Esta se quejó a su marido y él le dijo: es tu esclava, haz con ella lo que quieras. Sarai le llamó la atención, le dijo que las cosas no eran así… que cuidado… entonces… Agar asustada salió huyendo.

Junto a una fuente la encontró el ángel de Yahvé y le dijo: vuelve con tu señora, vas a tener un hijo, le llamaras Ismael y será un onagro (mamífero de la familia de los équidos, de un metro de altura más o menos, vive en Asia) de hombre. Su mano se alzará contra todos y las de todos contra él. ¡¡Amig@s, qué marrón le cayó al pobrecito!! ¡¡ Y hay que tener mal café para hacer una criatura así, como un burrito chiquitito!!

Ella se creía que Dios mismo le había hablado, y eso no está muy claro.

Volvió, claro que volvió, tuvo un hijo y fue llamado Ismael.

Cuando Abraham tenía noventa y nueve años, se le apareció de nuevo Yahvé, y a renovar el pacto. Por parte de Dios se ponía a disposición de Abraham y su descendencia, todas las tierras de Canaán y sus alrededores. Que también estaban habitados, pero eso no era problema, se les liquidaba y listo.

Por parte de Abraham, tenía que circuncidarse, él y todos sus allegados, sus esclavos y hasta el último gato (pero eso lo venían haciendo desde el comienzo de los tiempos en esa zona, era una forma de limpieza, de evitar futuras enfermedades).

Como todos sabéis, Jesús tambien fue circuncidado. Pero el prepucio (piel que recubre el final del pene) de Jesús debía ser especial, porque la mayoría de iglesias importantes tienen un trocito de él. Calculo a grosso modo, que serían un par de metros por lo menos.

Yahvé siempre estaba de visita. Se acercó en otra ocasión a Abraham y le comunicó que iba a ser papá, y Sara (ya le había cambiado el nombre, y no sé porqué) mamá. Este señor, ya tenía noventa y nueve años y ella estaba en la noventena, y ella se tronchaba de risa, decía algo así como “pero si a mí ya se me ha pasado el arroz”. Pero… como Yahvé era tan suyo, le dijo que sí; que por esas fechas lo tendría el próximo año.

Dos ángeles que le acompañaban se fueron hacia Sodoma y Gomorra. Querían ver in situ, los clamores que llegaban a sus oídos sobre la maldad de estas dos ciudades. Yahvé se quedó de charleta con Abraham y como eran amiguetes, le contó que los iba a destruir (por malos, viciosos, y por todo). A Abraham le dio pena y empezó el regateo que tanto gusta en los países de la zona, ¿Y si hay… tantos buenos? Y no había. Bajando más ¿y si hay…? Que no, que no había; sólo estaba un sobrino de nuestro protagonista, que se llamaba Lot, así que, Yahvé sacó a Lot, su mujer y sus hijas y destruyó las dos ciudades.

Me pregunto amig@s míos, ¿en esas ciudades, no había niños? ¿Acaso debían pagar por el vicio de sus padres? Otra vez estamos con el mismo problema. Somos seres individuales, ¿por qué debemos pagar las culpas de otros seres? Eso es algo incomprensible para mí.

Sara tuvo un hijo. Le llamaron Isaac. El Creador dijo que con su estirpe, establecería el pacto. Ya tenemos otra melé: era el segundo hijo. Lo normal, en aquellos tiempos sería hacerlo con el primogénito. Pero… no, eso era muy fácil, y las cosas había que complicarlas.

Bueno, mientras, Lot y su familia salieron de esas ciudades, pero Yahvé había ordenado no volver la vista atrás; la mujer de Lot, no pudo contener la curiosidad, y quedó convertida en una estatua de sal. ¡¡Jopeé!! Que diría el mismo amigo de antes. ¡Vaya tostada! En una cueva, el padre y las dos hijas, y ellas querían tener bebés. Lo que hicieron, fue emborrachar a su papi y acostarse con él. Ambas quedaron encintas y tuvieron su descendencia.



Volvemos al protagonista. Cuando estaban en el banquete celebrando el destete de Isaac, parece que Ismael se burló un poquito, quejose Sara a su esposo y le pidió que los echara, a la esclava y a su hijo, pues no quería que Ismael recibiese la misma herencia que su hijo.

Los despidió Abraham, con gran dolor de su corazón, por perder a su hijo.

Pasado el tiempo, el Creador, que no se podía quedar quieto, llamó a Abraham y este contestó “Heme aquí”, “Quiero que me ofrezcas a Isaac tu unigénito en holocausto”. Pero… esa palabra significa único hijo, y el tenía otro más mayor.

Esto vamos a aligerarlo porque me pone de los nervios.

Cuando este señor iba a descargar su cuchillo sobre el cuello de su hijo, aparece un ángel y le dice que era una prueba, y le da un corderito para que lo ofrezca en lugar de su hijo. El caso era hacer sangre, de quien sea. Esos sacrificios cruentos que solicitaban los dioses en la antigüedad, ahora nos ponen los pelos como escarpias. ¿Os imagináis que viene Dios y os pide ese sacrificio? De vuestro único hijo porque, estando la vida como está, no podemos tener otro. Saldríamos por patas a poner una denuncia por lavado de cerebro, por estafa emocional, por… querer que cometiésemos un asesinato. Yo no sé vosotros, pero si me sucediese a mí, ¡armaría la de Dios!


Continuaremos en la próxima entrada, pues esto da para mucho más y no quiero cansaros.

Adiós amig@s.