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lunes, 30 de agosto de 2010
sábado, 28 de agosto de 2010
La Comuna III
Hola amig@s
Hoy os escribo bajo una depresión. Mis pensamientos no son muy agradables, y me parece difícil que pueda conduciros a la risa, o a la sonrisa, como siempre es mi intención.
Mi deseo es hacer que vosotros y yo misma, pasemos un rato agradable. Me temo que ese día no es hoy.
Quiero dar un consejo a los que habéis sido padres o lo seréis pronto:
Los niños tienen muchos impulsos primitivos, que deben ser conducidos con mucho cuidado, hacia las normas que nuestra sociedad, imperfecta, ha creado para que nuestro grupo social, sea más homogéneo. La violencia, es uno de esos impulsos negativos que predominan en la psiquis del individuo.
En las relaciones, padre e hijo debe haber amor, nunca miedo. Cuando uno de nuestros pequeños, se ha peleado o ha agredido a un compañero o amigo, debe ser corregido, pero… sin emplear la violencia, ni con palabras, ni con hechos. Cuando un pequeño es corregido con violencia sufre una disfunción. Su cerebro, en formación, no puede admitir dos cosas totalmente opuestas. Por un lado, tratáis de que el no emplee la violencia, pero por otro, vosotros, estáis empleando esa violencia contra él.
A raíz de la muerte de José Saramago, quise releer algunas de sus obras. Traje de la biblioteca un par de ellas: Ensayo sobre la ceguera y El evangelio según Jesucristo. Ambos libros ya los había leído con anterioridad. Pero no recordaba una frase que encontré como un tesoro. Dijo María de Magdala (La Magdalena), que en la obra aparece como compañera de Jesús, y hermana de Lázaro, “que no debía permitir que un hombre se preparara para la muerte dos veces”. (En el evangelio según San Juan, aparece la resurrección de Lázaro, y la unión de amistad que existía entre Lázaro y sus hermanas Marta y María que Vivian en Betania. En el evangelio, no da a entender que María fuese La Magdalena, cosa que Saramago da por echa. Y por eso en esta obra Jesús no resucita a Lázaro.
Esta frase me hizo recordar un libro de mi poeta y escritor preferido, Khalil Gibran. La obra escrita por este autor, no es muy extensa, pero cada uno de sus libros, puede considerarse una pequeña joya. El libro más controvertido de Gibran es “Espíritus Rebeldes”; en el mismo volumen aparecen Lázaro y su amada. Es una obra poética que narra en un esquema de dramatismo la vida de Lázaro y su amada que le estaba esperando desde antes de la Eternidad, y su perfecta unión en un solo ser. Narra la desesperación en la que vive a partir de las palabras de Jesús, conminándole a salir del sepulcro y volver a la vida. Dicho libro fue quemado en una plaza de Beirut, y su autor, excomulgado y desterrado. En la primera obra hace una denuncia continuada sobre la opresión que el alto clero católico-maronita, ejercía sobre los campesinos pobres.
Cuenta también en su producción con la obra llamada “El Profeta” que es un compendio de consejos morales, que me gustaría que todos mis amigos leyesen, por su profundidad y la forma tan sencilla como está escrita para su comprensión, a cualquier nivel cultural que nos encontremos.
Hay un tema que me gustaría tratar con mis amig@s: Se trata de las hormonas sexuales. Todos sabéis que los ovarios, fabrican y segregan estrógenos y gestágenos. El estrógeno más importante que produce y sintetiza el ovario es el llamado estadil.
En el varón, los testículos, producen andrógenos, siendo la testosterona el andrógeno más potente. Sabéis que dichas hormonas, afectan a la sexualidad, al comportamiento, conllevan una carga de violencia, en resumen dichas hormonas nos tienen dominados.
Vale, yo lo entiendo pero no lo comprendo, y hablé de este tema con la princesita, que de medicina, sabe un montón. En mi interior siento que mis hormonas son en parte femeninas y otra parte masculinas. Intentamos llegar a un acuerdo, decidimos que lo más deseable sería, que los varones tuviesen un 75% de hormonas masculinas y las chicas, un 75% de hormonas femeninas y el resto serían del sexo opuesto. Me imagino un homo 100% de testosterona y aparece en mi mente un Neandertal. Me gustan los homos suavecitos, doraditos por el sol; si tienen vello, que sea poquito, que no parezca que tienen la piel de una oveja sobre sus hombros. Y con sensibilidad, cariñosos, besucones, amables, que escuchen y sepan hablar, que su tiempo no lo pasen viendo la tele. Tienen que ser cultos, pero que no te lo estén restregando por la nariz. Tambien me gusta que lloren, no todos los días, pero unas lagrimillas de vez en cuando, desahogan mucho. Y querid@s es que nuestros varones, han sido muy mal educados, los sentimientos, no los tienen a flor de piel. Van a un partido de futbol, y los ves llorar a moco tendido, pero esos mismos, se muere su madre, y es como si nada, permanecen inmutables.
¿Y las jovenzuelas? La que escribe, está atravesando una segunda juventud, y los estrógenos me salen hasta por las orejas. Cuando veo acercarse a un homo cachas, comienzo a calcular sus proporciones, si son correctas (eso es lo malo de vivir para el arte y por el arte) luego miro su rostro y si se ajusta a mi canon estético. El cuerpo, sin yo desearlo, comienza a cimbrearse, me pongo colorada pero es inevitable. Por la tarde voy a la consulta de mi médica y le digo: recétame unas cuantas cajas de testosterona, que esto es vergonzoso, me mira, me mira raro, escribe una receta y me la da. No sé que es lo que tomo, pero durante un tiempo, estoy peleona y quiero atacar a alguien.
Para finalizar esta entrada quiero, desearía, me gustaría que leyeseis otro libro. Se atiene a los hechos reales, hay misterio, amor, lujuria, bestialismo, casi, casi como la vida misma.
Su título es: Memorias de Adriano. Su autora, una de las grandes mujeres de la literatura francesa: Marguerite Yourcenar.
Hasta pronto amig@s
viernes, 20 de agosto de 2010
La Comuna segunda entrega...
Queridísim@s,
Como os dije en la anterior entrada, hoy voy a hablaros de la Comuna. Pero… será un poco más avanzado el texto.
El caso es que estoy tristona, me he levantado con el pie izquierdo, debe ser. Realmente, no es eso, sucede que estoy en plan intimista. Llevo muchos años, demasiados, durmiendo sola, en una cama que parece una plaza de toros. Estoy en un ladito, pero el otro vacío. Cuando… me doy la vuelta y así, entre sueños, extiendo un brazo, y no encuentro un cuerpo querido, un cuerpo que no me rehúya, que no se vaya a dormir al salón. Alguien que en verdad me quiera, y yo a él. Pero el tiempo pasa y no encuentro a mi “HOMO”.
Amig@s, soy una persona normal, no soy una ninfómana, ni nada de eso, lo que sucede es que las mujeres somos complicadas por naturaleza, y tengo una tendencia pulsional, en estos momentos, hacia la sexualidad, que es demasiado. Estoy plenamente en ni segunda juventud. Esta es más sosegada, más analítica y compleja. Pienso mucho y hago poco. Amig@s -no me como una rosca- no es que no tenga con quién …bueno… también es eso, lo que he comprendido, es algo importante. Las lecturas sobre psicología, me han ayudado mucho. No obstante, se lo comentaré a mi amiguito “D”; él es psicólogo, y me ayudará. Aquí le voy a dejar una nota, para que se ponga en contacto conmigo ( “D” te necesito, cinco minutos ), pero creo que el problema lo tengo resuelto, y no es mío (creo que no es mío, a lo mejor sí). Veréis: Varios homos cachas, están todo el rato, venga, vamos a tomar un café, y una charleta, así nos conocemos, yo me hago la estrecha y después de mucho rogar, cedo, y digo, bueno…quedamos para el café, pero amig@s de repente esas personas han emigrado, supongo, porque no he vuelto a saber de ellas, y hasta desaparecen de Meetic. Uno de mis libros dice que eso es “miedo escénico”,
vamos, que les entra un “canguis”, que les ocupa todo el cuerpo.
Lo mejor son mis amiguitos jovencitos. Me llaman y dicen: - venga que te invito a comer, digo yo: - estoy sin duchar, sin arreglar, no puedo, así deprisa y corriendo, me dicen: - mira, mientras te duchas, y te pones cualquier cosa, voy hasta allí. Esos sí, sí que son caballeros, mis niños. Pero los grandes, todo les parece lejos. Si del centro hasta casa son veinte minutos, parece que les mando a la guerra. Amig@s, eso es que mucho interés, no tienen, si tuvieran ochenta, o noventa años, lo entendería e iría a buscarles yo a la residencia, pero…no es así, querid@s, es que no; leo entre líneas y veo, por un lado, eso del “miedo escénico” y por otro que la gasolina vale más que el aceite de oliva. Y el tiempo pasa y estoy aquí, escribiendo y leyendo, sin encontrar a mi homo.
Lo mejor son mis amiguitos jovencitos. Me llaman y dicen: - venga que te invito a comer, digo yo: - estoy sin duchar, sin arreglar, no puedo, así deprisa y corriendo, me dicen: - mira, mientras te duchas, y te pones cualquier cosa, voy hasta allí. Esos sí, sí que son caballeros, mis niños. Pero los grandes, todo les parece lejos. Si del centro hasta casa son veinte minutos, parece que les mando a la guerra. Amig@s, eso es que mucho interés, no tienen, si tuvieran ochenta, o noventa años, lo entendería e iría a buscarles yo a la residencia, pero…no es así, querid@s, es que no; leo entre líneas y veo, por un lado, eso del “miedo escénico” y por otro que la gasolina vale más que el aceite de oliva. Y el tiempo pasa y estoy aquí, escribiendo y leyendo, sin encontrar a mi homo.
Tengo que contaros también, que les hago la “prueba del algodón”.Eso no es algo científico, pero me funciona. Cuando estamos con el cafetito, en un descuido de ellos, les pongo una manita en el brazo, con un dedito, lo paso suavecito, arriba y abajo. Chic@s, si el vello se me pone como escarpias… Tate, puede resultar; si no es así, agarro el bolso, y lo primero que se me ocurre, les digo: que me voy a tirar la basura, que luego huele muy mal…cualquier cosa, que le vaya al momento. Salgo pitando como “alma que lleva el diablo”.
Ahora sí, llega lo de la comuna:
Tendrá que ser el principio, en un lenguaje, críptico, pero ya estáis acostumbrados.
Nosotros vivíamos en una colmena;
cuando la reina de la colmena, decidió que esta no era la adecuada para ella (creo que perdía prestigio), y emigró a otra colmena, más numerosa, dije yo: pues hala, me pongo yo (de reina).
Empezaron a llegar abejitas, que tenían colmena, pero les gustaba más esta (no era por la colmena en sí, les gustaba, porque la reina les iba cantidad), ellas se han quedado con su colmenita, pero de aquí no se mueven, a no ser que haya una emergencia.
Cuando ya estábamos tod@s, decidimos en conjunto que esto sería una comuna, y no una colmena, que las reinas mandaban mucho y hacían poco. Queríamos igualdad. Pensamos en unas normas, no escritas, que hemos interiorizado.
La Comuna, no es muy grande, está compuesta por los niños (el varón de la comuna y su pibita, ella no vive aquí, pero casi y para todo cuenta), tenemos a la princesita, y a “Lo”, y estoy yo, que soy la jefa o sea, la que parte el bacalao (pero poco).
La Comuna es normal. Lo más extraño es la cocina y la terraza.
Primero la cocina: Ya os había adelantado que tenemos un fantasma encerrado en el frigorífico. No sabemos su nombre, y debió llegar con el frigo. Nos hemos acostumbrado a él y no nos asusta. De vez en cuando hace…uhhhhhh, uhhhhhh, y gime y llora.
A veces le preguntamos qué le sucede, pero es un cabezón y no contesta. Lo peor… veo que está por llegar: Creo que este fantasma está ejerciendo influencias malignas sobre nosotros (quería yo que llamásemos a los que escuchan las psicofonías, pero como los de la Comuna son tan suyos, no quisieron). Pero amig@s, el dichoso fantasma se está apoderando de mí, y la primera vez que lo pudimos comprobar, estaba yo de espaldas, hablando, y una de la comuna me interrumpió. Entonces di la vuelta y tod@s me estaban mirando horrorizados, esperando que comenzase a expulsar, una especie de materia verde por la boca (tipo niña del exorcista, pero en grande). Cuando me fijé en sus expresiones, (los ojos como platos, la boca laxa, blanca la tez), amig@s casi me da un “patatús”, y más, y mucho más, cuando me dijeron lo que todos habían escuchado de mis labios, una palabra, Querid@s que no es una palabra, que es un “palabro”, ¡¡¡qué vergüenza, amig@s!!! Soy una persona educada, incapaz de decir esas brutalidades, ni pensarlas siquiera me permito. Lo malo es que ya van varias de esas. Hemos decidido estar en silencio. para que no haya equívocos. Y la sobremesa, y las charletas, esas que tenemos, pues…vamos tod@s, nos tiramos encima de mi lecho, cada un@, con su ordenador, y hablamos tranquilamente. A la vez, cotilleamos (pero poco), y también, la princesita hace un trabajo (secreto), no puedo delatarla, “Lo”, hace horarios, y más horarios, luego todo el rato la llaman de su trabajo, y por lo bajo, siempre está mascullando “a ese mañana, me lo cargo”, así todos los días, debe tener una meleé en la empresa alucinante, siempre la plantilla en revolución, tiene un café, esta chica… El problema también lo he estudiado, ella tiene fuerte el carácter, pero en casa, sólo mando yo, porque conozco las técnicas y además las tácticas de guerra. Pero a lo bruto os contaré que el otro día, me fui a tomar café, y tardé un poco, y el móvil en casa y el abrecartas también. Cuando se dieron cuenta, se pusieron a cenar, no sé qué guarrería, ellas tampoco, comían, pero no sabían qué de los nervios. Entonces, llegué, abrí la puerta y me encontré dos fieras corrupias echando rayos y centellas por los ojos, por la boca; no podían de la ira contenida que las inundaba el cuerpo. Me dije, para mí ¡¡madre mía!! como están, me van a poner de hoja de perejil, o más verde. Eché un vistazo, para situarme, y vi que “Lo” tenía una gelatina azul en la rodilla, pensé rápidamente “esta chica, ya se ha cargado a otro empleado”. Entonces, ella abrió la boca, me dijo: - ¡Usted, se cree!, no, no, amig@s, no le dejé terminar. ¿Sabéis la técnica que utilizaban los ingleses cuando dejaban un país que había sido protectorado suyo, para que siempre dependiesen de la metrópoli? Ellos utilizaban, y si pueden lo siguen haciendo, porque, aunque sus gobiernos cambien de partido, su política exterior siempre es la misma. Dividieron la India y ahí están tirándose bombazos todos los días. ¿Y de Palestina, que me decís? Desde finales del siglo XIX, los judíos sionistas ya estaban dando la vara a la opinión pública mundial, diciendo que Palestina era una tierra sin habitantes, y los palestinos, unos nómadas, que ahora estaban aquí, luego allí, vamos que no existían mis palestinos. Ahora están todos en campos de refugiados, y comiéndose los codos de hambre, y sed de conocimientos, pues han cerrado colegios y universidades.
Veo, que me estoy alejando. Hice igual, empleé el divide y vencerás, y otra que yo sabía de Maquiavelo que es así: La mejor defensa es un buen ataque. Y me salió redondo.
Cuando “Lo” abrió la boca, me lancé sobre ella (figuradamente) y comencé a decirla. ¿A ver qué te ha pasado, con quien la has tenido? Ella se achantó, bajó la cabecita, y la voz, la princesita, ya estaba a punto de meterse debajo de la mesa, con la mirada, para otro sitio. Como diciendo “Yo no he sido”. Y así terminé con la sublevación, me fui a mi dormitorio, más ancha que larga, y cuando volví, tenían mi cenita, preparada.
Seguiremos otro día con ella.
A mis pequeñuelos, tengo que explicarles algo muy doloroso para mí. Pero…no quiero que nadie los engañe.
Querid@s muchachuel@s, cuando queráis saber la edad de una mujer, tal que yo misma, no miréis en su DNI; tampoco en su pasaporte, o cualquier documento, no, si…la señora en cuestión lleva una blusita, que le llega hasta casi la boca, cubriendo todo el cuello (es ese espacio situado entre el tronco y la cabeza) y además, las manguitas de la blusa casi le tapan los dedos, cuidado ahí tenéis una señora de edad madura, más o menos como vuestra mami. Hay otra zona peligrosa, pero más difícil de apreciar: se encuentra al final de los muslos; se pone la chichita blandita, y no hay solución. Amig@s, la Naturaleza, nos tiene enfiladas a las mujeres: primero, los partos que duele un montón. Después, nos ha puesto la edad, nos la ha escrito en el cuello, brazos y muslos.
La Naturaleza, aunque su articulo es femenino, debería llamarse, el Naturalezo. Es misógina, nos odia, y tiene mucha importancia, pequeñaj@s. Tenéis que saber, que en el Siglo de las Luces Francés (el XVIII), aparece L`Encyclopédie, dirigida por Diderot y D`Alembert más los especialistas de la época en todas las materias. Se imponen nuevos valores. Aquí está el primero: La Naturaleza, la felicidad terrena, el progreso, y tambien se opone a la monarquía absoluta y a la religión.
Amig@s comenzó el ateismo y también los métodos experimentales (que suelo utilizar siempre que es posible), y como son aplicados (los métodos experimentales), a cuestiones, tales como las filosóficas, querid@s, nos llevaron al Empirismo, que resumiendo, es la experiencia basada en los sentidos, sin actividad del espíritu.
¡Qué tragedia amig@s mi@s!, sobre todo, para las distintas religiones, que populaban por doquier.
Volveré.
domingo, 15 de agosto de 2010
sábado, 14 de agosto de 2010
La Comuna
Queri@s,
Me acabo de dar cuenta de que soy una cobarde. ¡Sí!, muy cobarde: vengo huyendo de Meetic. Casi todos sabéis que soy miembro de ese colectivo, para conocer amigos, para chatear, etc. Tengo puesto en mi perfil, que domino el Inglés y el Árabe, es cierto, pero… una cosa es hablar y otra escribir. Y hace mucho tiempo que no escribo en Inglés (bueno, eso no es muy cierto, casi todas las noches, chateo con un amigo americano que vive en N.Y. pero este amigo ya sabe como soy yo, escribo más bien como suena, y eso no es así, pero él me entiende, y, amigos… lo peor de todo, es cuando tengo que conversar con alguien que no domina el Castellano, ni el Árabe, ¡qué desastre! empiezo a ponerme nerviosa, y por aquí pongo una palabra en Inglés, una en Francés, me refuerzo con el Italiano, meto algo de Árabe, etc. Y mi partener, ya me he perdido amigos, esa palabra, no la recuerdo en Castellano, y no sé si la he puesto en Inglés o en Francés.
Os pido disculpas. Os acordáis que venía huyendo. He visto un nuevo miembro de Meetic, guapísimo, de 48 años que está como un “queso”, y mi dedo, que parece que va a su aire, yo no lo domino, le ha lanzado un flechazo. Luego he leído que es holandés, y habla Holandés, Alemán, e Inglés; con tan mala suerte que mientras yo leía su perfil, él ha leído, el mío, y sin pensárselo dos veces, quería hablar conmigo. Y qué angustia me ha entrado, vamos… que he huido, que escriba lo que quiera en un email, y ya me lo pensaré. El problema, es que soy un ave nocturna, cuando se acerca la noche, empiezo a vivir, antes no; antes estoy en un estado de alelamiento, que antes cuando existía el Limbo, decía: estoy como en el Limbo. Pero amigos míos, la Iglesia ¡nos da cada palo!.
Vino un Papa (no recuerdo cual fue) y dijo: ¡Ya no hay Limbo! ¿ Y ahora? ¿Qué hacemos sin Limbo? Porque antes, cuando se moría un niñito sin bautizar, sabíamos donde iba. ¿Y los infieles, todos, aunque sean buenos? ¿y vosotros? Que no es por señalar, pero lo he visto, agnósticos todos. Uffffff cuánto sufro.
Tenía una amiga, que era católica, apostólica y romana. Vamos que era de los católicos más puros; cuando hablábamos de este asunto, decía que había que tener una religión, (como ahora ya están con la mente más abierta), la que fuese, pero eso de no tener ninguna, no es posible.
Adoptaba yo de papel del agnóstico, y le decía a mi amiga, que el agnóstico, cree en que hay algo, pero… no como nos lo cuentan las religiones. También decía: ¿No es más admirable una persona que es buena porque quiere serlo, sin pensar en una recompensa en el Más Allá? Y mi amiga, ni me entendía, ni me comprendía (ya os explicaré la gran diferencia que hay entre estás dos palabrejas, que parecen sinónimas, no es que sean antónimas, tampoco es eso, pero casi). Y tenía otra amiga más. Pero… ambas, se fueron lejos a vivir, y me dije… las mujeres y yo, no nos entendemos, prefiero tener amigos: como máximo pueden hablar de fútbol, y antes sabía mucho de ese deporte, que si las cotizaciones de los futbolistas, los traspasos, etc. Me empapaba del fútbol, con una intención; poder mantener una conversación medianamente inteligible, que fuese algo más que el sí y el no. Ya no lo necesito, como dicen los árabes alhandulela (gracias a Dios).
He hecho un inciso, me he fumado un cigarrillo, y he tratado de concentrarme, estoy un poco dispersa.
Lo primero, voy a daros dos consejos. Ambos los he llevado a la práctica, para conocer sus beneficios.
El primero es sólo para las chicas. Los varones absteneros de leerlos, no es bueno para nosotras que lo sepáis.
¡Ay! amigas, no puedo volver a meterme en Meetic. He ido a ver el correo, y está el holandés esperándome. ¡Y qué congoja! Cuando me pongo nerviosa, no doy “pie con bola”. En verdad, que ahora mismo me metería debajo de la cama. Esto me pasa por lianta, por meterme en “camisas de once varas”. Chicas, nunca hagáis lo que yo hago, muy mal ejemplo os estoy dando.
Sigo con el consejo. Un día, la semana pasada, por razones que no vienen al caso, tenía que salir. Mi abuela, siempre me decía: hija, sal de casa siempre con las braguitas limpias, por lo que pueda pasar. Mi abuela, estaba obsesionada, pensaba: qué vergüenza si le pasa algo (por lo de los hospitales y esas cosas), y lleva las braguitas sucias. También me acuerdo de Paris Hilton, bajando una escalera; llevaba un vestido largo, y como le sobrarán los dólares pero no tiene estilo (para tener estilo, hay que cultivarlo, es como el vino y el seny, y requiere años) pues esta señorita, para no pisarse el vestido, se lo subió hasta la cintura, no llevaba braguitas, y mejor que las hubiese llevado: tenía… bueno, no tenía (os hablo así porque los chicos no están, ya les he dicho que esto es sólo para nosotras) en la parte delantera, se veían dos palitos, nada más, y por detrás, chicas, eso ni era culo, ni culito, ni culete, ni nada, eso era como una tabla de planchar, no tenía nada para sentarse ¡qué pena! Ya veis chicas, que el dinero no es todo. Si no tienes algo mullidito para sentarte, pues cuando lo hagas se te clava la columna vertebral en la silla, y estás en un puro grito.
Íbamos por lo de las braguitas, pero… también, como estoy en busca de mi “homo”, por si acaso, por lo que pueda pasar, siempre muy decentita. Y por determinadas causas, no podía acceder al lugar donde las tenía (eso conlleva el vivir en una comuna), pero el varón que tenemos en casa (el resto somos todas chicas) está de vacaciones con su pibita. Cogí un slip muy mono, a rayitas negras y rojas, como unas braguitas, muy bonito, y me lo puse; se sube mucho, hacia las caderas, (por lo tanto, chicas, primero hay que estar musculadas, sin pasarse, porque luego pareces un tío -quiero decir un varón-). Me miré en el espejo del pasillo (que no es un espejo, son dos cristales con un paño especial dentro. Como el paño no se distingue, lo usamos de espejo), y pensé para mí (como los chicos no están, puedo hablar con más naturalidad, y sin tantos remilgos) ¡¡¡Jolines!!! qué buenorra estoy todavía. Os aconsejo que cojáis los slips de vuestros chicos, pero sin decírselo, son los hombres muy complicados, no los entiendo y cada día menos, pero me gustan, qué le voy a hacer. Les pides su vida y te la dan, pero pídeles un slip, les entra un cabreo… Tienen una fijación con esa prenda, incomprensible, pueden llegar a todo; hasta romper la pareja, el divorcio, lo que sea, no se paran en prendas, es de alucine. Al final, mejor os compráis unos cuantos para vosotras, y se terminan los problemas.
Y ahora, ya todos juntos, vamos a por el siguiente consejo: Si queréis tener la piel suave, como la de un bebé, cuando estéis en la ducha, tomad una manopla de esas que son como de cuerdecita, ponéis en ella un puñadito de sal marina, y os frotáis el cuerpo con la manopla (las chicas, sobre todo, el culete y las piernas). Los chicos… todo menos las partes nobles, a ver si las vais a dejar en ”carne viva”, y luego las chicas se me echan encima. La que esto os cuenta, es muy bruta, y comenzó con sal gruesa, primero para ver si se iba la celulitis, que en parte se fue y luego, porque en la comuna, había mucha, y no sabía qué hacer con ella. A mí lo del pescado a la sal, no me va, por una razón: en la comuna, hemos decidido por mayoría absoluta, ser vegetarianas y comer sin sal, no somos veganas (comemos pescado, huevos, leche, queso, etc), no comemos carne.
Le consulté a mi farmacéutica qué le parecía; me contestó: es un poco bruto, se pueden romper los capilares. Por eso, os recomiendo sal normal marina. Todas las pequeñas impurezas de la piel desaparecen, y se queda una piel… (no me gusta, me parece poco culto repetir las mismas palabras. Tengo a mi lado un libro de sinónimos y antónimos, y he buscado una palabra para sustituir piel. Para no repetirla aconsejan emplear: pelleja, pellejo. Amigos, prefiero repetir a poner esas palabras. A mí personalmente, me suenan fatal) como el culito de un bebé (esto creo que lo he repetido, pero… no importa, así se os queda más grabado). A mí los hombres me gusta que tengan la piel suavecita. Cuando tenía pareja, solía comprarle, todas las cremitas que veía, ahora que ya no tengo, pues eso que me ahorro.
Pensaba amig@s, hablaros de la Comuna. Ciertamente, os contaré algo, pero sólo como introducción (por cierto, ahora que me acuerdo, tengo que pediros disculpas, en la entrada anterior os dije que no había un señor chincheto, inculta de mí, yo iba por lo religioso, cómo soy, y … no había buscado donde está la ciencia. Mis profes siempre decían: no busquéis en Internet, que siempre ponen tonterías, no son cosas serias. Ellos, los profes, lo que no querían era que viésemos, el “Rincón del Vago”. Cuando me encontré con dicho rincón, y los apuntes que tenían, dije: ¡qué faena! si lo llego a saber, no me matriculo de dos carreras, me matriculo de tropecientas. Aún estoy a tiempo, pero… no sé… Y no sé porque mi amigo “H” me ha metido en un embolado de mucho cuidado: me ha recomendado leer un libro, que me ayudaría a resolver mis problemas. A él le había gustado mucho. Lo encontré en la biblioteca de mi pueblo y feliz y contenta me puse a leerlo. En la introducción, el traductor (que seguro que ha ganado una pasta gansa) decía, que era aconsejable leer dicho libro, teniendo al lado un diccionario de filosofía. El bendito libro se titula así: ”Fundamentos del comportamiento colectivo”. Y sigo; como en mi haber tenía dos años de Filosofía, dije para mí: “esto es pan comido” y me adentré en su lectura. En principio, lo entendía pero no lo comprendía,
Y volvía al principio, e igual otra vez, luego me dio por pensar… ¿lo estaré leyendo en Alemán? Pero amig@s, si no sé Alemán. Me sucede mucho que cojo un libro, en Inglés o en Francés o Italiano, lo leo y al final digo: pero si lo estoy leyendo en tal idioma, y me empiezo a preocupar, diciendo ¡Dios Mío! qué poco me falta para estar en un psiquiátrico. Sigo: los autores son alemanes, pero eso no tiene nada que ver, el problema es que mi amigo es un superdotado, y se cree que todo el mundo es igual, y no es eso. Yo soy una persona con muchas limitaciones. Bueno ya me he adentrado en el meollo del libro. El problema ahora, es que cada frase, tengo que volver sobre ella y analizarla, para comprenderla. ¡Qué menos amigos! que leer tres libros a la semana, dos en inglés y el tercero en castellano. Pero desde hace un par de semanas, ahí están los otros, muertos de risa.
El problema va a ser cuando venga mi amigo. Él seguro que quiere mi opinión sobre el libro, o que se lo comente o cualquier cosa, y me ha destrozado la vida el libro ese, sí, os lo juro. Primero hay que recordar la Primera Guerra Mundial, después la época entre guerras y por último la Segunda Guerra Mundial y hay que tenerlo fresquito. Amigos, nunca os haría yo una cosa semejante. De verdad, no sé como terminará esto, porque ambos tenemos un pronto… que no nos bajamos del burro con facilidad
Amig@s, voy a terminar esta entrada, diciéndoos que en la cocina de nuestra Comuna, hay un fantasma en el frigorífico (que no es broma, cualquiera puede comprobarlo), y también tenemos muy malas vibraciones, o sea que una (solo hay un chico, por eso hablo en femenino pues las chicas somos muchas) de nosotras dice una palabra inocente, y el resto oye algo inaudito.
Pensaba, llamar a esos señores que escuchan las psicofonías, pero las chicas, como esta Comuna es tan especial, no estaban dispuestas a salir en la prensa. Y ya sabéis vosotr@s cómo son los de la prensa, les das un dedito, y sin darte cuenta, se han apropiado de tu mano, el brazo… Cuando te das cuenta los tienes encima de ti, como pulpos. Y en mi comuna, cuando alguien quiere entrar, tiene que firmar un documento de confidencialidad, o sea, que de lo que vea u oiga, ni “mu”.
Querid@s continuaré en la próxima entrada.
Me acabo de dar cuenta de que soy una cobarde. ¡Sí!, muy cobarde: vengo huyendo de Meetic. Casi todos sabéis que soy miembro de ese colectivo, para conocer amigos, para chatear, etc. Tengo puesto en mi perfil, que domino el Inglés y el Árabe, es cierto, pero… una cosa es hablar y otra escribir. Y hace mucho tiempo que no escribo en Inglés (bueno, eso no es muy cierto, casi todas las noches, chateo con un amigo americano que vive en N.Y. pero este amigo ya sabe como soy yo, escribo más bien como suena, y eso no es así, pero él me entiende, y, amigos… lo peor de todo, es cuando tengo que conversar con alguien que no domina el Castellano, ni el Árabe, ¡qué desastre! empiezo a ponerme nerviosa, y por aquí pongo una palabra en Inglés, una en Francés, me refuerzo con el Italiano, meto algo de Árabe, etc. Y mi partener, ya me he perdido amigos, esa palabra, no la recuerdo en Castellano, y no sé si la he puesto en Inglés o en Francés.
Os pido disculpas. Os acordáis que venía huyendo. He visto un nuevo miembro de Meetic, guapísimo, de 48 años que está como un “queso”, y mi dedo, que parece que va a su aire, yo no lo domino, le ha lanzado un flechazo. Luego he leído que es holandés, y habla Holandés, Alemán, e Inglés; con tan mala suerte que mientras yo leía su perfil, él ha leído, el mío, y sin pensárselo dos veces, quería hablar conmigo. Y qué angustia me ha entrado, vamos… que he huido, que escriba lo que quiera en un email, y ya me lo pensaré. El problema, es que soy un ave nocturna, cuando se acerca la noche, empiezo a vivir, antes no; antes estoy en un estado de alelamiento, que antes cuando existía el Limbo, decía: estoy como en el Limbo. Pero amigos míos, la Iglesia ¡nos da cada palo!.
Vino un Papa (no recuerdo cual fue) y dijo: ¡Ya no hay Limbo! ¿ Y ahora? ¿Qué hacemos sin Limbo? Porque antes, cuando se moría un niñito sin bautizar, sabíamos donde iba. ¿Y los infieles, todos, aunque sean buenos? ¿y vosotros? Que no es por señalar, pero lo he visto, agnósticos todos. Uffffff cuánto sufro.
Tenía una amiga, que era católica, apostólica y romana. Vamos que era de los católicos más puros; cuando hablábamos de este asunto, decía que había que tener una religión, (como ahora ya están con la mente más abierta), la que fuese, pero eso de no tener ninguna, no es posible.
Adoptaba yo de papel del agnóstico, y le decía a mi amiga, que el agnóstico, cree en que hay algo, pero… no como nos lo cuentan las religiones. También decía: ¿No es más admirable una persona que es buena porque quiere serlo, sin pensar en una recompensa en el Más Allá? Y mi amiga, ni me entendía, ni me comprendía (ya os explicaré la gran diferencia que hay entre estás dos palabrejas, que parecen sinónimas, no es que sean antónimas, tampoco es eso, pero casi). Y tenía otra amiga más. Pero… ambas, se fueron lejos a vivir, y me dije… las mujeres y yo, no nos entendemos, prefiero tener amigos: como máximo pueden hablar de fútbol, y antes sabía mucho de ese deporte, que si las cotizaciones de los futbolistas, los traspasos, etc. Me empapaba del fútbol, con una intención; poder mantener una conversación medianamente inteligible, que fuese algo más que el sí y el no. Ya no lo necesito, como dicen los árabes alhandulela (gracias a Dios).
He hecho un inciso, me he fumado un cigarrillo, y he tratado de concentrarme, estoy un poco dispersa.
Lo primero, voy a daros dos consejos. Ambos los he llevado a la práctica, para conocer sus beneficios.
El primero es sólo para las chicas. Los varones absteneros de leerlos, no es bueno para nosotras que lo sepáis.
¡Ay! amigas, no puedo volver a meterme en Meetic. He ido a ver el correo, y está el holandés esperándome. ¡Y qué congoja! Cuando me pongo nerviosa, no doy “pie con bola”. En verdad, que ahora mismo me metería debajo de la cama. Esto me pasa por lianta, por meterme en “camisas de once varas”. Chicas, nunca hagáis lo que yo hago, muy mal ejemplo os estoy dando.
Sigo con el consejo. Un día, la semana pasada, por razones que no vienen al caso, tenía que salir. Mi abuela, siempre me decía: hija, sal de casa siempre con las braguitas limpias, por lo que pueda pasar. Mi abuela, estaba obsesionada, pensaba: qué vergüenza si le pasa algo (por lo de los hospitales y esas cosas), y lleva las braguitas sucias. También me acuerdo de Paris Hilton, bajando una escalera; llevaba un vestido largo, y como le sobrarán los dólares pero no tiene estilo (para tener estilo, hay que cultivarlo, es como el vino y el seny, y requiere años) pues esta señorita, para no pisarse el vestido, se lo subió hasta la cintura, no llevaba braguitas, y mejor que las hubiese llevado: tenía… bueno, no tenía (os hablo así porque los chicos no están, ya les he dicho que esto es sólo para nosotras) en la parte delantera, se veían dos palitos, nada más, y por detrás, chicas, eso ni era culo, ni culito, ni culete, ni nada, eso era como una tabla de planchar, no tenía nada para sentarse ¡qué pena! Ya veis chicas, que el dinero no es todo. Si no tienes algo mullidito para sentarte, pues cuando lo hagas se te clava la columna vertebral en la silla, y estás en un puro grito.
Íbamos por lo de las braguitas, pero… también, como estoy en busca de mi “homo”, por si acaso, por lo que pueda pasar, siempre muy decentita. Y por determinadas causas, no podía acceder al lugar donde las tenía (eso conlleva el vivir en una comuna), pero el varón que tenemos en casa (el resto somos todas chicas) está de vacaciones con su pibita. Cogí un slip muy mono, a rayitas negras y rojas, como unas braguitas, muy bonito, y me lo puse; se sube mucho, hacia las caderas, (por lo tanto, chicas, primero hay que estar musculadas, sin pasarse, porque luego pareces un tío -quiero decir un varón-). Me miré en el espejo del pasillo (que no es un espejo, son dos cristales con un paño especial dentro. Como el paño no se distingue, lo usamos de espejo), y pensé para mí (como los chicos no están, puedo hablar con más naturalidad, y sin tantos remilgos) ¡¡¡Jolines!!! qué buenorra estoy todavía. Os aconsejo que cojáis los slips de vuestros chicos, pero sin decírselo, son los hombres muy complicados, no los entiendo y cada día menos, pero me gustan, qué le voy a hacer. Les pides su vida y te la dan, pero pídeles un slip, les entra un cabreo… Tienen una fijación con esa prenda, incomprensible, pueden llegar a todo; hasta romper la pareja, el divorcio, lo que sea, no se paran en prendas, es de alucine. Al final, mejor os compráis unos cuantos para vosotras, y se terminan los problemas.
Y ahora, ya todos juntos, vamos a por el siguiente consejo: Si queréis tener la piel suave, como la de un bebé, cuando estéis en la ducha, tomad una manopla de esas que son como de cuerdecita, ponéis en ella un puñadito de sal marina, y os frotáis el cuerpo con la manopla (las chicas, sobre todo, el culete y las piernas). Los chicos… todo menos las partes nobles, a ver si las vais a dejar en ”carne viva”, y luego las chicas se me echan encima. La que esto os cuenta, es muy bruta, y comenzó con sal gruesa, primero para ver si se iba la celulitis, que en parte se fue y luego, porque en la comuna, había mucha, y no sabía qué hacer con ella. A mí lo del pescado a la sal, no me va, por una razón: en la comuna, hemos decidido por mayoría absoluta, ser vegetarianas y comer sin sal, no somos veganas (comemos pescado, huevos, leche, queso, etc), no comemos carne.
Le consulté a mi farmacéutica qué le parecía; me contestó: es un poco bruto, se pueden romper los capilares. Por eso, os recomiendo sal normal marina. Todas las pequeñas impurezas de la piel desaparecen, y se queda una piel… (no me gusta, me parece poco culto repetir las mismas palabras. Tengo a mi lado un libro de sinónimos y antónimos, y he buscado una palabra para sustituir piel. Para no repetirla aconsejan emplear: pelleja, pellejo. Amigos, prefiero repetir a poner esas palabras. A mí personalmente, me suenan fatal) como el culito de un bebé (esto creo que lo he repetido, pero… no importa, así se os queda más grabado). A mí los hombres me gusta que tengan la piel suavecita. Cuando tenía pareja, solía comprarle, todas las cremitas que veía, ahora que ya no tengo, pues eso que me ahorro.
Pensaba amig@s, hablaros de la Comuna. Ciertamente, os contaré algo, pero sólo como introducción (por cierto, ahora que me acuerdo, tengo que pediros disculpas, en la entrada anterior os dije que no había un señor chincheto, inculta de mí, yo iba por lo religioso, cómo soy, y … no había buscado donde está la ciencia. Mis profes siempre decían: no busquéis en Internet, que siempre ponen tonterías, no son cosas serias. Ellos, los profes, lo que no querían era que viésemos, el “Rincón del Vago”. Cuando me encontré con dicho rincón, y los apuntes que tenían, dije: ¡qué faena! si lo llego a saber, no me matriculo de dos carreras, me matriculo de tropecientas. Aún estoy a tiempo, pero… no sé… Y no sé porque mi amigo “H” me ha metido en un embolado de mucho cuidado: me ha recomendado leer un libro, que me ayudaría a resolver mis problemas. A él le había gustado mucho. Lo encontré en la biblioteca de mi pueblo y feliz y contenta me puse a leerlo. En la introducción, el traductor (que seguro que ha ganado una pasta gansa) decía, que era aconsejable leer dicho libro, teniendo al lado un diccionario de filosofía. El bendito libro se titula así: ”Fundamentos del comportamiento colectivo”. Y sigo; como en mi haber tenía dos años de Filosofía, dije para mí: “esto es pan comido” y me adentré en su lectura. En principio, lo entendía pero no lo comprendía,
Y volvía al principio, e igual otra vez, luego me dio por pensar… ¿lo estaré leyendo en Alemán? Pero amig@s, si no sé Alemán. Me sucede mucho que cojo un libro, en Inglés o en Francés o Italiano, lo leo y al final digo: pero si lo estoy leyendo en tal idioma, y me empiezo a preocupar, diciendo ¡Dios Mío! qué poco me falta para estar en un psiquiátrico. Sigo: los autores son alemanes, pero eso no tiene nada que ver, el problema es que mi amigo es un superdotado, y se cree que todo el mundo es igual, y no es eso. Yo soy una persona con muchas limitaciones. Bueno ya me he adentrado en el meollo del libro. El problema ahora, es que cada frase, tengo que volver sobre ella y analizarla, para comprenderla. ¡Qué menos amigos! que leer tres libros a la semana, dos en inglés y el tercero en castellano. Pero desde hace un par de semanas, ahí están los otros, muertos de risa.
El problema va a ser cuando venga mi amigo. Él seguro que quiere mi opinión sobre el libro, o que se lo comente o cualquier cosa, y me ha destrozado la vida el libro ese, sí, os lo juro. Primero hay que recordar la Primera Guerra Mundial, después la época entre guerras y por último la Segunda Guerra Mundial y hay que tenerlo fresquito. Amigos, nunca os haría yo una cosa semejante. De verdad, no sé como terminará esto, porque ambos tenemos un pronto… que no nos bajamos del burro con facilidad
Amig@s, voy a terminar esta entrada, diciéndoos que en la cocina de nuestra Comuna, hay un fantasma en el frigorífico (que no es broma, cualquiera puede comprobarlo), y también tenemos muy malas vibraciones, o sea que una (solo hay un chico, por eso hablo en femenino pues las chicas somos muchas) de nosotras dice una palabra inocente, y el resto oye algo inaudito.
Pensaba, llamar a esos señores que escuchan las psicofonías, pero las chicas, como esta Comuna es tan especial, no estaban dispuestas a salir en la prensa. Y ya sabéis vosotr@s cómo son los de la prensa, les das un dedito, y sin darte cuenta, se han apropiado de tu mano, el brazo… Cuando te das cuenta los tienes encima de ti, como pulpos. Y en mi comuna, cuando alguien quiere entrar, tiene que firmar un documento de confidencialidad, o sea, que de lo que vea u oiga, ni “mu”.
Querid@s continuaré en la próxima entrada.
martes, 10 de agosto de 2010
A mis amigos:
En principio, había pensado escribir una vez a la semana, así, vosotros podíais darme ideas de temas interesantes, para todos.
Pero… ha surgido un problema que tengo que resolver en el blog.
Resulta, que había planeado dos eventos.
El primero era ir a la caza y captura de “chinchetas y setas”.
Se animó mucha gente, pero… como yo doy muchas vueltas a las cosas, pensé… ¿Y qué culpa tienen las pobres setitas, de lo que hacen las chinchetas? Y les dije a mis amigos, que se olvidasen del evento, porque mis amigos son tan especiales, que hablando de “fiestucas”, no se pierden ni una.
Tambien pensé…vamos a terminar convertidos en asesinos en serie. Lo mejor era dejar las cosas como estaban.
Pero… aparece un tal chincheto, no se si es un nick o un nombre. Desde luego, un nombre, no es. Vosotros mis amig@s, sabéis que yo soy una persona muy unida a la religión, a todas, todas me van mucho, cada cierto tiempo, me cambio. Pero…tengo mis costumbres, como por ejemplo: cada año, voy a una tienda especializada en la venta de velas, santitos, rosarios, y esas cosas, bueno, pues allí compro cada año dos santorales. Para los que no sois muy religiosos, y para nuestros amigos de otros países, tengo que explicar, qué es un santoral. Pues, es un calendario, anual, en el que cada día está dedicado a uno o varios santos. Os preguntareis por qué compro dos; uno lo tengo en la cocina, como ya sabéis que son muy despistada, cuando quiero coger una tapadera caliente, y no encuentro un paño, pues cojo una página del santoral, y puedo sujetar, sin quemarme, la tapadera. No os he explicado, que los santorales, son tacos de hojas, y fácilmente pues ir quitando cada hoja.
El otro, le tengo en el baño, normalmente, tenemos revistas, cada uno la que quiere, pero, si se nos olvidan, pues cogemos el santoral y lo vamos repasando, de esa forma, yo los cumpleaños no los felicito (porque a muchas personas no les agrada eso de cumplir años, a mí sí, por una razón: yo, cada año me quito uno, y así soy más feliz, ya no sé los que tengo, no deben ser muchos, porque eso de ir por la calle bailando, no me parece muy normal, pero me sale de dentro, no lo puedo ni lo quiero evitar) bueno vuelvo a donde estaba. Os decía que los santos, si los felicito. Y de verdad, por más que he mirado, y remirado, no encuentro un san Chincheto, por lo que he deducido que es un nick, pero no es amigo nuestro, lo sé porque vosotr@s tod@s sois muy inteligentes, claro… yo a la pregunta de esta persona, le conteste de forma críptica y no me ha entendido. Mis amig@s todos son muy inteligentes y desde la cuna, junto a las primeras letras habéis aprendido el lenguaje cifrado, y después, todos en Internet hemos visto, por si alguna vez lo necesitamos, cómo se hace una bomba de neutrones, o cómo te puedes cargar a todo el mundo, pero los edificios y el resto de las cosas se quedan tal cual. Bueno, que esta persona es de otra galaxia. Por lo tanto como me pide una contestación más clara, se la daré, a costa de vuestra paciencia (aunque, también es vuestra culpa, si… me hubieseis ayudado a encontrar un tema) no estaría yo, contestando al Sr. Chincheto. Aunque procuraré no extenderme demasiado, y si lo capta bien y si no que se aguante.
Las “chinchetas”, como le decía hace unos días, son las portadoras de las setitas. Las chinchetas, cuando son pequeñitas, son muy monas, pero… cuando son grandes, es diferente. Pequeñas, son saladas, graciosas de muchos colores, y la puntita es muy fina; pero…en cuanto que la usas una vez…para que esta persona me entienda, usaré un símil humano en la comparación. Su cuello se engrosa de forma alarmante, y vamos bajando y nos encontramos con los senos, pero no son como dos, no, son como muchos más, y luego hay otra forma, que parece un estomago después de comerse una vaca , bajamos más y…oh sorpresa , por detrás, es una plaza de toros, y la parte delantera la forman como varias faldillas, ya sabéis que las personas muy gruesas, tienen una capa de grasa que llega a los muslos, llamada vulgarmente faldilla, pues de esas varias. Y los muslos y brazos, son como las Columnas de Hércules pero en blandito. Una vez que has usado una chinchetita, pasa a ser chincheta, y portadora de setitas, esa es su principal ocupación; después, cada uno que ha usado la chincheta, se responsabiliza de una setita, la setita no tiene por qué ser del usador, simplemente, la chincheta dice: esta setita linda es tuya, y el usador, que se lo cree todo, porque llega a un grado de alelamiento demencial, que lo que dice la chincheta,” va a misa”, y de esa forma, cada setita, está limpia, aseada, no le falta de nada, y por ende a la chincheta tampoco. No sé que método emplean las chinchetas, creo que es similar a las sectas. Están al acecho y cuando ven a los usadores de chinchetas, con un bajón existencial, entonces, se lanzan a su captura.
Amigos…ya no voy a continuar explicando nada más a este señor, que mi paciencia tiene un límite y la vuestra también.
EL HOMO....
El segundo “evento” era la captura de un Homo Sapiens Sapiens. Las chicas se apuntaron todas, hasta las comprometidas, con la aquiescencia de sus parejas, y empezamos a planearlo…Yo quería utilizar un método que se llama Krav Maga, dice este libro (que es mi libro de cabecera, o sea que me lo pongo debajo de la almohada para que esta resulte más dura, estilo japonés, yo utilizo un libro y ellos un taco de madera, por eso tienen así la cabeza un poco alargada.) que es para defenderse de un ataque armado, bueno, eso es lo que dicen los autores que son israelíes, pero la verdad es que ¡¡¡te enseñan a dar unos mamporros!!! y yo quería ponerlo en practica, a ver si funcionaba, bueno…, tambien llevo un estilete, muy afilado, es de plata y lo cuido muy bien, en realidad, es un abrecartas, eso es lo que digo a la “poli” si me hacen alguna pregunta. Y lo llevo para limpiarme las uñas. Y con eso quedo divina. Lo llevo siempre, por si acaso, las mujeres de antes lo solían llevar en los ligueros. Pero como yo soy muy funcional, no uso esas tonterías, me lo pongo en el ajustador, se ve un poquito el mango, pero…la gente se cree que es parte de los adornos y pasa tranquilamente. Otras veces, cuando salgo con alguien que no conozco demasiado, me echo al bolso, unas esposas, porque ahora la gente, está muy grillada, te dicen: vamos a casa, que te he cocinado una sorpresita, y luego dicen ahora vamos a jugar a un juego que te va a encantar; y yo empiezo a mosquearme-y dice-te tengo que atar. Y entonces digo, dios mío, otro loco suelto, ¡cuando encontraré uno normal! Y cuando el chalado, va en busca de la cuerdecita, ya tengo yo en mis manos las esposas, el estilete y un frasco de pimienta (tiene que ser negra, es más efectiva que la blanca, y además tiene que estar molida, porque sino, no funciona), y le digo, ahora vamos a jugar a otro juego que yo se, con esto que tengo en las manos. La gente, que rara es, quieren que juegues a lo que ellos quieren, pero a lo que quieres tú, siempre se niegan. Y luego salen corriendo del piso, y no se por qué, si están en su casa, (yo a mi casa no llevo a nadie) se van, sin llaves, y sin nada, y me dejan sola… ¡Qué desastre! ¡qué desastre de citas!, ninguna me sale bien, tengo que volver a casa en el metro, a las tantas, sin tomar el postre. Porque esa es otra, siempre, se les ocurre jugar antes de tomar el postre. ¡ La vida ya no es lo que era!. En mi primera juventud, te invitaban a un chocolate, te acompañaban a casa, eran unos caballeros. Pero ahora, como yo no estoy al día, de los juegos esos y los míos me tienen muy prevenida, pues yo a la mínima me mosqueo, y luego pasa lo que pasa, no se si alguien me denunciará, pero si es así, pues los polis dirán…pero, oiga, esta venerable ancianita, ¿le ha podido hacer a usted eso? Segura estoy que termina en chirona.
Me había perdido, ya no sabía por dónde estaba. Pero ahora…ya recuerdo.
No os he explicado para que quería el “homo”. Lo quería para mí sola (tenía que ser algo excepcional en todos los sentidos, pero esencialmente en los físicos, yo no me iba a quedar con él luego, pedía un rescate, y lo devolvía) la historia es que me había comprado el Kamasutra, y quería practicar todas las posturas, haber si eran factibles. Igual que hice con las leyes de Murphy, a mi me gusta, todo muy científico, como …no quería que se enteraran los de la comuna (esa es otra historia, que ya os contaré, en el momento oportuno) más bien, porque son muy cotillos y se quieren enterar de todo, y cuando estoy haciendo un experimento, ya quieren participar. Considero, que ciertos pasos de los experimentos, han de ser en la soledad del laboratorio. En este caso, mi dormitorio. Lo tenía todo pensado, debajo de la cama hay un cajón del mismo tamaño que el lecho, le sacaba por la noche y al experimento. Claro, que entre horas le daría de comer, y al baño, una ducha y esas cosas.
Pero yo no lo tenía claro, desde que estudié Geografía (qué castaña, amigos, solo me quedó el amor por las piedras, y alguna otra cosilla), pero las encuestas, me gustaban. Es una forma interesante, de saber por donde” van los tiros”. Salí a la calle con mi libreta y el boli, y a cada posible homo cachas, le preguntaba ¿Si yo te raptara, tú que harías?,y amigos qué desastre…me decían: ¿dónde hay que apuntarse?, ya sabéis que yo quería resistencia, para practicar, mis lecturas nocturnas. No , no, no era eso lo que esperaba. Los hombres sois muy diferentes a nosotras, las chicas (normales), si nos dice eso un señor, aunque esté como un queso, y el culete redondito, precioso, le damos un guantazo que lo mandamos lejos. Eso lo llevamos en los genes.
Y desistí de ese evento, y el Kamasutra a la basura, no vayan a pensar los de la comuna que soy un poco lanzada, de eso nada.
Y voy a dejaros por hoy, diciéndoos que me siento muy feliz, porque mi amigo “O” (este es de los raros, que tiene un trabajo, en defensa del Estado y no puedo poner más)
Pues estábamos un poquito morrones, y todo fue por una tontería, cosas de críos…
Empezó a decir que él tenía…y eso me pone a mí muy mal, entonces, le dije que yo más, el con otra cosa- y yo más. Si llegamos a estar face to face nos damos de tortas.
Antes, siempre era yo menos, pero desde que fui a la psicóloga (esa es otra historia), me dijo, fuera eso tú siempre más, y luego, con el sueño de Lílith, pues yo más y siempre tenía que quedar por encima.
Pero…yo estaba muy triste, sabéis que soy una esteta, y la belleza, me nutre, y mi amigo “O”, no es cualquier cosa ,¿sabéis el dibujo del hombre de Leonardo, que se basó en el célebre hombre de Vitrubio, y con este dibujo nos proporcionó, el nuevo canon de proporciones del hombre, cuando los historiadores del arte hablan de la proporción de el David de Miguel Ángel, no se dan cuenta que está cargado de manierismo, y se ve la desproporción de la que carece la obra de Leonardo. Pues amigos no quiero aburriros, pero tenéis que saber que “O” es más. En todo,
De ahí mi tristeza y ahora mi alegría.
Hasta la próxima entrada, amig@s.
En principio, había pensado escribir una vez a la semana, así, vosotros podíais darme ideas de temas interesantes, para todos.
Pero… ha surgido un problema que tengo que resolver en el blog.
Resulta, que había planeado dos eventos.
El primero era ir a la caza y captura de “chinchetas y setas”.
Se animó mucha gente, pero… como yo doy muchas vueltas a las cosas, pensé… ¿Y qué culpa tienen las pobres setitas, de lo que hacen las chinchetas? Y les dije a mis amigos, que se olvidasen del evento, porque mis amigos son tan especiales, que hablando de “fiestucas”, no se pierden ni una.
Tambien pensé…vamos a terminar convertidos en asesinos en serie. Lo mejor era dejar las cosas como estaban.
Pero… aparece un tal chincheto, no se si es un nick o un nombre. Desde luego, un nombre, no es. Vosotros mis amig@s, sabéis que yo soy una persona muy unida a la religión, a todas, todas me van mucho, cada cierto tiempo, me cambio. Pero…tengo mis costumbres, como por ejemplo: cada año, voy a una tienda especializada en la venta de velas, santitos, rosarios, y esas cosas, bueno, pues allí compro cada año dos santorales. Para los que no sois muy religiosos, y para nuestros amigos de otros países, tengo que explicar, qué es un santoral. Pues, es un calendario, anual, en el que cada día está dedicado a uno o varios santos. Os preguntareis por qué compro dos; uno lo tengo en la cocina, como ya sabéis que son muy despistada, cuando quiero coger una tapadera caliente, y no encuentro un paño, pues cojo una página del santoral, y puedo sujetar, sin quemarme, la tapadera. No os he explicado, que los santorales, son tacos de hojas, y fácilmente pues ir quitando cada hoja.
El otro, le tengo en el baño, normalmente, tenemos revistas, cada uno la que quiere, pero, si se nos olvidan, pues cogemos el santoral y lo vamos repasando, de esa forma, yo los cumpleaños no los felicito (porque a muchas personas no les agrada eso de cumplir años, a mí sí, por una razón: yo, cada año me quito uno, y así soy más feliz, ya no sé los que tengo, no deben ser muchos, porque eso de ir por la calle bailando, no me parece muy normal, pero me sale de dentro, no lo puedo ni lo quiero evitar) bueno vuelvo a donde estaba. Os decía que los santos, si los felicito. Y de verdad, por más que he mirado, y remirado, no encuentro un san Chincheto, por lo que he deducido que es un nick, pero no es amigo nuestro, lo sé porque vosotr@s tod@s sois muy inteligentes, claro… yo a la pregunta de esta persona, le conteste de forma críptica y no me ha entendido. Mis amig@s todos son muy inteligentes y desde la cuna, junto a las primeras letras habéis aprendido el lenguaje cifrado, y después, todos en Internet hemos visto, por si alguna vez lo necesitamos, cómo se hace una bomba de neutrones, o cómo te puedes cargar a todo el mundo, pero los edificios y el resto de las cosas se quedan tal cual. Bueno, que esta persona es de otra galaxia. Por lo tanto como me pide una contestación más clara, se la daré, a costa de vuestra paciencia (aunque, también es vuestra culpa, si… me hubieseis ayudado a encontrar un tema) no estaría yo, contestando al Sr. Chincheto. Aunque procuraré no extenderme demasiado, y si lo capta bien y si no que se aguante.
Las “chinchetas”, como le decía hace unos días, son las portadoras de las setitas. Las chinchetas, cuando son pequeñitas, son muy monas, pero… cuando son grandes, es diferente. Pequeñas, son saladas, graciosas de muchos colores, y la puntita es muy fina; pero…en cuanto que la usas una vez…para que esta persona me entienda, usaré un símil humano en la comparación. Su cuello se engrosa de forma alarmante, y vamos bajando y nos encontramos con los senos, pero no son como dos, no, son como muchos más, y luego hay otra forma, que parece un estomago después de comerse una vaca , bajamos más y…oh sorpresa , por detrás, es una plaza de toros, y la parte delantera la forman como varias faldillas, ya sabéis que las personas muy gruesas, tienen una capa de grasa que llega a los muslos, llamada vulgarmente faldilla, pues de esas varias. Y los muslos y brazos, son como las Columnas de Hércules pero en blandito. Una vez que has usado una chinchetita, pasa a ser chincheta, y portadora de setitas, esa es su principal ocupación; después, cada uno que ha usado la chincheta, se responsabiliza de una setita, la setita no tiene por qué ser del usador, simplemente, la chincheta dice: esta setita linda es tuya, y el usador, que se lo cree todo, porque llega a un grado de alelamiento demencial, que lo que dice la chincheta,” va a misa”, y de esa forma, cada setita, está limpia, aseada, no le falta de nada, y por ende a la chincheta tampoco. No sé que método emplean las chinchetas, creo que es similar a las sectas. Están al acecho y cuando ven a los usadores de chinchetas, con un bajón existencial, entonces, se lanzan a su captura.
Amigos…ya no voy a continuar explicando nada más a este señor, que mi paciencia tiene un límite y la vuestra también.
EL HOMO....
El segundo “evento” era la captura de un Homo Sapiens Sapiens. Las chicas se apuntaron todas, hasta las comprometidas, con la aquiescencia de sus parejas, y empezamos a planearlo…Yo quería utilizar un método que se llama Krav Maga, dice este libro (que es mi libro de cabecera, o sea que me lo pongo debajo de la almohada para que esta resulte más dura, estilo japonés, yo utilizo un libro y ellos un taco de madera, por eso tienen así la cabeza un poco alargada.) que es para defenderse de un ataque armado, bueno, eso es lo que dicen los autores que son israelíes, pero la verdad es que ¡¡¡te enseñan a dar unos mamporros!!! y yo quería ponerlo en practica, a ver si funcionaba, bueno…, tambien llevo un estilete, muy afilado, es de plata y lo cuido muy bien, en realidad, es un abrecartas, eso es lo que digo a la “poli” si me hacen alguna pregunta. Y lo llevo para limpiarme las uñas. Y con eso quedo divina. Lo llevo siempre, por si acaso, las mujeres de antes lo solían llevar en los ligueros. Pero como yo soy muy funcional, no uso esas tonterías, me lo pongo en el ajustador, se ve un poquito el mango, pero…la gente se cree que es parte de los adornos y pasa tranquilamente. Otras veces, cuando salgo con alguien que no conozco demasiado, me echo al bolso, unas esposas, porque ahora la gente, está muy grillada, te dicen: vamos a casa, que te he cocinado una sorpresita, y luego dicen ahora vamos a jugar a un juego que te va a encantar; y yo empiezo a mosquearme-y dice-te tengo que atar. Y entonces digo, dios mío, otro loco suelto, ¡cuando encontraré uno normal! Y cuando el chalado, va en busca de la cuerdecita, ya tengo yo en mis manos las esposas, el estilete y un frasco de pimienta (tiene que ser negra, es más efectiva que la blanca, y además tiene que estar molida, porque sino, no funciona), y le digo, ahora vamos a jugar a otro juego que yo se, con esto que tengo en las manos. La gente, que rara es, quieren que juegues a lo que ellos quieren, pero a lo que quieres tú, siempre se niegan. Y luego salen corriendo del piso, y no se por qué, si están en su casa, (yo a mi casa no llevo a nadie) se van, sin llaves, y sin nada, y me dejan sola… ¡Qué desastre! ¡qué desastre de citas!, ninguna me sale bien, tengo que volver a casa en el metro, a las tantas, sin tomar el postre. Porque esa es otra, siempre, se les ocurre jugar antes de tomar el postre. ¡ La vida ya no es lo que era!. En mi primera juventud, te invitaban a un chocolate, te acompañaban a casa, eran unos caballeros. Pero ahora, como yo no estoy al día, de los juegos esos y los míos me tienen muy prevenida, pues yo a la mínima me mosqueo, y luego pasa lo que pasa, no se si alguien me denunciará, pero si es así, pues los polis dirán…pero, oiga, esta venerable ancianita, ¿le ha podido hacer a usted eso? Segura estoy que termina en chirona.
Me había perdido, ya no sabía por dónde estaba. Pero ahora…ya recuerdo.
No os he explicado para que quería el “homo”. Lo quería para mí sola (tenía que ser algo excepcional en todos los sentidos, pero esencialmente en los físicos, yo no me iba a quedar con él luego, pedía un rescate, y lo devolvía) la historia es que me había comprado el Kamasutra, y quería practicar todas las posturas, haber si eran factibles. Igual que hice con las leyes de Murphy, a mi me gusta, todo muy científico, como …no quería que se enteraran los de la comuna (esa es otra historia, que ya os contaré, en el momento oportuno) más bien, porque son muy cotillos y se quieren enterar de todo, y cuando estoy haciendo un experimento, ya quieren participar. Considero, que ciertos pasos de los experimentos, han de ser en la soledad del laboratorio. En este caso, mi dormitorio. Lo tenía todo pensado, debajo de la cama hay un cajón del mismo tamaño que el lecho, le sacaba por la noche y al experimento. Claro, que entre horas le daría de comer, y al baño, una ducha y esas cosas.
Pero yo no lo tenía claro, desde que estudié Geografía (qué castaña, amigos, solo me quedó el amor por las piedras, y alguna otra cosilla), pero las encuestas, me gustaban. Es una forma interesante, de saber por donde” van los tiros”. Salí a la calle con mi libreta y el boli, y a cada posible homo cachas, le preguntaba ¿Si yo te raptara, tú que harías?,y amigos qué desastre…me decían: ¿dónde hay que apuntarse?, ya sabéis que yo quería resistencia, para practicar, mis lecturas nocturnas. No , no, no era eso lo que esperaba. Los hombres sois muy diferentes a nosotras, las chicas (normales), si nos dice eso un señor, aunque esté como un queso, y el culete redondito, precioso, le damos un guantazo que lo mandamos lejos. Eso lo llevamos en los genes.
Y desistí de ese evento, y el Kamasutra a la basura, no vayan a pensar los de la comuna que soy un poco lanzada, de eso nada.
Y voy a dejaros por hoy, diciéndoos que me siento muy feliz, porque mi amigo “O” (este es de los raros, que tiene un trabajo, en defensa del Estado y no puedo poner más)
Pues estábamos un poquito morrones, y todo fue por una tontería, cosas de críos…
Empezó a decir que él tenía…y eso me pone a mí muy mal, entonces, le dije que yo más, el con otra cosa- y yo más. Si llegamos a estar face to face nos damos de tortas.
Antes, siempre era yo menos, pero desde que fui a la psicóloga (esa es otra historia), me dijo, fuera eso tú siempre más, y luego, con el sueño de Lílith, pues yo más y siempre tenía que quedar por encima.
Pero…yo estaba muy triste, sabéis que soy una esteta, y la belleza, me nutre, y mi amigo “O”, no es cualquier cosa ,¿sabéis el dibujo del hombre de Leonardo, que se basó en el célebre hombre de Vitrubio, y con este dibujo nos proporcionó, el nuevo canon de proporciones del hombre, cuando los historiadores del arte hablan de la proporción de el David de Miguel Ángel, no se dan cuenta que está cargado de manierismo, y se ve la desproporción de la que carece la obra de Leonardo. Pues amigos no quiero aburriros, pero tenéis que saber que “O” es más. En todo,
De ahí mi tristeza y ahora mi alegría.
Hasta la próxima entrada, amig@s.
viernes, 6 de agosto de 2010
Mis queridos amigos..
Mis Queridos Amigos:
He tardado cierto tiempo en comenzar este blog, porque realmente la informática no es mi fuerte. Espero que con la ayuda de todos, podamos conseguir algo ameno y divertido.
Deseo comentaros, que es un proyecto para que un grupo de personas, en general no conectadas entre sí, terminen siendo amigos.
Otra de mis motivaciones, es la esperanza de evitar la soledad que genera la deshumanización de nuestras grandes urbes.
Al repasar los famosos “Salones” de la Edad Media y los más importantes del siglo XVII, pensé que en la época actual, podíamos reunirnos un grupo mixto, compuesto por personas de diversas edades. Y también, lo que es más importante, amigos de diferentes países, que dominan el Castellano perfectamente, lo cual nos beneficia a todos, pues de esa forma, los temas a tratar, tendrán más variedad de enfoque, y resultará enriquecedor para todos en conjunto.
Había pensado, que quizá las cuestiones a analizar, serían más amenas si no son excesivamente serios los temas.
Ciertamente, será mi blog, pero deseo que pertenezca a todo el grupo. Podíamos seguir una norma; los temas que os atraigan y las explicaciones que queráis aportar, me las mandáis por email, y yo lo incluyo; los comentarios si no son muy extensos los podemos tratar directamente en el blog.
Y ahora amigos, os preguntareis por qué vosotros y no otros habéis sido invitados a uniros al grupo. Os diré que en verdad la decisión ha sido totalmente mía, respecto a los varones. Todos tenéis algo en común sois verdaderamente bellos, pero… hombres atractivos, hay muchos, entonces había que profundizar en otras características o cuestiones que os hacían diferentes y cada uno de vosotros, para mí es único.
Tenemos un amigo, que sus palabras destilan poesía y con las manos forja la magia.
Está la persona que emplea los apelativos cariñosos que no están al uso, pero que inmediatamente conectan con el corazón formando un vínculo muy especial.
Tenemos la sonrisa más bonita y cautivadora que yo he podido contemplar, además su carácter es fuerte y no le importa disculparse si cree que debe hacerlo, es un hombre muy, muy especial y con una cultura apabullante, y además nadie le ha regalado nada, todo, lo ha conseguido a base de un gran esfuerzo personal.
Y quizá mi más cariñoso amigo, portador del (como dicen los catalanes) seny o en Castellano, señorío, pero tiene más musicalidad, la palabra en Catalán, Guapo, elegante, comprensivo, siempre está cuando necesitas un amigo. Con una palabra justa en el momento adecuado.
Otro de mis amigos, el que soporta mis rabietas, y mis enfados sin alterarse lo más mínimo, es pausado y tranquilo relaja el ambiente, con su forma de comportarse. Hay algo que olvidaba deciros: algunos de nuestros compañer@s, tiene unos trabajos, o bien relacionados con la defensa del Estado, o bien son personas conocidas que no desean que aparezca su rostro, ni su verdadero nombre, por lo tanto, la mayoría tenemos un nick que podemos emplear si así lo consideramos oportuno.
Bueno ya iremos conociéndonos pasito a pasito.
Sobre las damas y señoritas: también constituyen un grupo muy peculiar cada una con una belleza distinta, pero lo más bonito que tienen está en el interior.
Hay algo en común, todos en conjunto sois personas muy inteligentes, y cultivadas. De carreras o estudios realizados, no quiero hablar, esto no es una competición de jovencitos, sobre todo después del fallecimiento de un Premio Nóbel, Saramago, que era totalmente autodidacta, y sucede otra cosa más. Que al ser las carreras cada día más especializadas, o te formas en otras materias o terminas siendo un analfabeto funcional.
Como soy la anfitriona, os hablaré un poco por encima de mí; nuestro amigo el poeta dice: ¿por qué te empeñas en ponerte unos años que no tienes? En realidad, no siento que pertenezca a una determinada edad, es que ya ni la recuerdo, estoy en un periodo regresivo, porque cada día que pasa siento que soy un día más joven, con mi cuerpo más estilizado por el deporte, y mi corazón, latiendo como el de una jovenzuela que desea enamorarse, e ir de la mano de su amor por la calle bailando y dando saltos. Aunque mi mente parece que ha soportado miles de años, por motivos incomprensibles que después os iré narrando. La naturaleza, se ha portado muy bien conmigo y me ha concedido una segunda juventud, que yo trataré de aprovechar al máximo, sin dañar a nadie, pero tampoco permitiré, ser dañada. Creo que mi vida ha comenzado sólo hace unos meses, el pasado ha dejado de existir para mí, y vivo como en una burbuja de amor que generan mis seres más queridos. Y también mis amigos. Nunca había sido tan feliz como ahora lo soy… Y quiero daros a todos las gracias, porque sin vuestra ayuda ya no estaríamos en el mismo plano existencial.
Para distender la narración, porque los comienzos suelen ser pesados, y aburridos, os daré dos consejos:
1º Esas manchitas que el sol pone en nuestra piel, el método más efectivo, rápido y económico de deshacernos de ellas, es frotar un trocito de limón sobre la mancha, luego esa zona se queda un poco reseca, pero con cualquier crema nutritiva, lo arreglamos. Pero, si no son manchas sino pecas, por favor…no las toquéis, que resultan un atractivo más en vuestras personas.
2º Como todos somos adultos: os diré que el mejor modo y el más saludable de estar en forma, es “hacer el amor”, pero… no a lo bruto, con la primera persona que se os ponga por delante, tiene que haber, una serie de sentimientos que unan a los dos seres que son imprescindibles: atracción física, sensación de estar en el sitio adecuado y con la persona idónea, naturalidad, si es posible afecto, cariño, y si hay amor…¡¡¡ya es una pasada!!!
Ahora, voy a hablaros de mis sueños, sueños que son recurrentes, vuelven una y otra vez. A veces siento o presiento que he vivido varias vidas, recuerdo las cosas y las personas, los paisajes, edificios y contextos muy reales, tanto es así que cuando despierto, me cuesta un rato, saber dónde estoy en ese momento y quién soy. Por supuesto, yo no creo en las reencarnaciones, tan alejadas de nuestro contexto cultural.
Sabéis que para mí la Historia es muy importante, y dentro de ella la Historia Antigua y más dentro aún las religiones o mitos en la Antigüedad, también las religiones comparadas.
No obstante, sabéis que mi formación, es científica y humanista aunque en las leyes establecidas no crea demasiado. En la únicas leyes que en verdad creo, es leyes de Murphy he podido llevarlas a cabo, y son totalmente ciertas; sobre todo en la aplicada a la tostada, esa no me falló ninguna vez, me dejó boquiabierta (te acuerdas querido H).
Una tarde la dediqué entera a hacer el siguiente experimento: compré un paquete de pan de molde, un tarro de mermelada, y otro de miel, también mantequilla, porque como la margarina es más ligera, no quería variar el experimento, tenía que utilizar los mismos ingredientes que Murphy. Siempre, siempre, la mermelada, terminaba rozando el suelo, cuando dejaba caer la tostada. Y era increíble, no importaba la distancia de la caída, asombroso, totalmente asombroso.
En este primer sueño que es el primero que tuve (si alguna persona tiene una religiosidad muy definida, quizá sería mejor que no continuase leyendo, lo que voy a narraros).
Por supuesto, en nuestros sueños, siempre pasamos a ser los protagonistas. Bueno…ya comienzo.
Yo era Lilith, la primera mujer creada por Jehová, o Elohim o simplemente la denominación actual que es Dios.
Me creó perfecta, y después quiso darme un compañero, pero no se molestó tanto, éramos diferentes en muchos aspectos; a mí me gustaba caminar por aquel jardín tan maravilloso que habitábamos, acompañada de multitud de animalillos que eran nuestros amigos, y las serpientes, con sus pequeñas patitas, caminaban a mi lado. Adán, era un desastre, como no tenía que trabajar, siempre estaba echado sobre la hierba y sin dejar de comer los frutos que crecían en los innumerables árboles. Su conversación, era tan aburrida, que yo continuaba mi eterno paseo y de vez en cuando, se cruzaba en mi camino, el ángel más bello de la creación y comenzamos a intimar. Un día me dijo que Dios, estaba celoso de su belleza, y por eso le había alejado de su vista, que no había sucedido ninguna rebelión. Realmente pensando ahora con la reflexión que se adquiere con la lejanía, eran ambos como el haz y el envés de una misma hoja. Jehová, era un anciano de luengas barbas de aspecto cansado, y cara terrible de celos y justicia a ultranza. Mientras que mi ángel, tenía, la lozanía eterna de la juventud, su cuerpo la perfección, y su mirada, el brillo del amanecer, y si cerraba sus ojos, todo, se oscurecía para mí.
Pero… yo era la compañera que Elohim había creado para Adán, y así continúe, hasta que… un día íbamos a hacer el acto sexual, (porque en realidad aquello, no se podía llamar de otra forma), como estaba tan grueso…me aplastaba, no podía, me ahogaba, según supe después esa era la única forma permitida para hacerlo, porque, la mujer debía estar sometida al varón en todo momento, yo…eso…no lo sabia, además, era imposible de soportar, yo quería estar arriba y no debajo. Me negué, o era como yo quería, o no había nada que hacer. Adán, como un niño mimado, se fue corriendo, a contárselo todo al Gran Jefe, y…cuando les ví llegar, con una cara de enfado en Adán, y la de Dios que echaba rayos y centellas por su rostro y además acompañados de un ángel, que portaba una espada de fuego, creo que dije: pies para que os quiero. Me encontré en la huída con mi ángel, al que conté mis desgracias, y unimos nuestros destinos para siempre, y vivimos inmensamente felices, durante muchos, muchos siglos.
Hasta mi despertar.
Aquí, he de hacer un inciso, cuando no me encontraron, a Adán le dio una especie de pataleta, y todo era ¡¡¡¡yo quiero, yo quiero!!!! y Jehová que lo único que deseaba era quitarse el problema de encima, y para hacerlo todo más rápido, pues ya estaba harto del quejicoso Adán, le durmió, y le quitó una costilla, y con ella modeló a Eva ( qué trabajo le hubiese costado, hacer una enterita, nueva, sin mezcla. Pues…¡¡¡no!!! tuvo que ser de una costilla del vago de Adán, ¡¡¡qué desastre, dios mío, que desastre!!! . ¿Os imagináis amig@s lo que era aquello. Los dos tumbados, todo el día, en la yerba, alargaban un brazo y cogían cualquier fruto y a comer.
Resulta, que Elohim, que tenía muy mal café, y quería ante todo obediencia plena, pues se le ocurrió, poner un árbol especial, era el Árbol del conocimiento, y quien lo comía podía distinguir, entre el Bien y el Mal. Prohibido, estaba prohibido, para esta pareja de tontainos. Además si a ellos no les interesaba saber nada, si estaban así muy bien…Pero…Jehová estaba aburrido de ver a esos gandules, todo el día sin hacer nada, nada de nada y para animar un poco el ambiente, le dijo a la serpiente: lleva estos frutos a los humanos, y dáselos, para que los coman. La serpiente, que en el fondo era una buenaza, se lo dijo,”cuidado” ¡esto me suena muy mal¡¡¡pero ellos vieron esa fruta tan bonita, que nunca la habían comido antes (creo que era una paraguaya) y no escucharon a mi amiga, la serpiente. ¡¡¡¡La que se armó!!!! . Como todavía no se había inventado lo del nudismo, se vieron de repente desnuditos, se escondieron detrás de una morera, por eso podéis observar que en las pinturas siempre aparecen tapándose sus partes más intimas (Eva, lo tenía más complicado), con una hoja grande de morera, claro que no era una hoja normal, como las de ahora, (estaban en el Edén y todo allí era exagerado).
Elohim, les llamo; y ellos ni caso, y les volvió a llamar y nanay y a la tercera llamada, cuando, su creador ya estaba, que se salía, aparecieron por allí, haciéndose los locos como…si con ellos, no fuera la cosa. Cuando Jehová les vio tapaditos dijo: “ya está”
Ya se han comido la paraguaya, y creo que pensó, os vais a arrepentir, pero no sólo vosotros, no… Todos vuestros descendientes, vais a nacer con el pecado original (qué pasada) y además a trabajar duro, pero eso ahora ¿cómo lo hacemos? Y que manía con las mujeres, nos tenía enfiladas (teníamos que parir con dolor, con mucho dolor, cuanto más mejor), menos mal que ahora, con la epidural, no te enteras de gran cosa pero de todas formas aquello fue demasiado, y les echó del Edén, bueno, bueno qué rencor.
Amigos, ya seguiré con otro sueño, que este ya no da para más.
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